En pocos días arranca la campaña electoral y los partidos comienzan una carrera de fondo para convencer al electorado con propuestas de lo más reaccionarias o alrededor de una misma cuestión. Ejemplo de ello son los diferentes puntos de vista que las formaciones valencianas han lanzado en cuanto a las consellerias. Y es que aunque algunos no han planteado modificaciones, otros han optado por separar y ampliar y otros, en cambio, prefieren recortar y unir.
En la actual legislatura, la del Govern del Botànic, un total de nueve consellerias han gestionado políticas públicas. Hacienda y Modelo Económico (Vicent Soler); Justicia, Administración Pública, Reformas Democráticas y Libertades Públicas (Gabriela Bravo); Sanidad Universal y Salud Pública (Ana Barceló) y Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio (María José Salvador) han sido las lideradas por el PSPV, mientras que Compromís se ha hecho cargo de Igualdad y Políticas Inclusivas (Mónica Oltra); Educación, Investigación, Cultura y Deporte (Vicent Marzà); Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo (Rafael Climent) y Transparencia, Responsabilidad Social, Participación y Cooperación (Manuel Alcaraz). Se suma la de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural (Elena Cebrián), independiente.
Podem: nuevas Consellerias
Así, la confluencia formada por Unides Podem-Esquerra Unida (EUPV), anunciaron hace unas semanas la necesidad de que la administración “esté a la altura de las reclamaciones de las mujeres y del colectivo LGTBI”, por lo que lanzaron la propuesta de crear una Conselleria de Feminismos y LGTBI. Un organismo que ven necesario para que los objetivos relacionados con estos colectivos “no queden tapados por otras competencias” ya que, para conseguirlo, se necesitan recursos propios y personal experto que trabajen en conjunto con el resto de áreas, aseguraron Rosa Pérez Garijo (EUPV) y Pilar Lima (Unides Podem).Además, el pacto de izquierdas baraja otras posibilidades en cuanto a la distribución de las consellerias. El periódico Valencia Plaza, de hecho, asegura que en un encuentro con el candidato de Unides Podem a la Generalitat Valenciana, Rubén Martínez Dalmau explicó que es partidario de separar Educación y Cultura, la segunda como un ente propio, así como hacer de Turismo otra nueva área.
Ciudadanos: concentración
Por la parte de Ciudadanos, el panorama es muy diferente. En este caso, el candidato a la presidencia, Toni Cantó, anunció el jueves pasado que reduciría de diez a siete el número de Consellerias “para destinar el dinero a médicos, colegios y dependencia” porque “la Comunidad Valenciana necesita una Administración a la altura, con menos estructuras inútiles, menos chiringuitos y enchufados y menos políticos”. Con su campaña ‘Le doy un bocado’, el político se ha comprometido a adelgazar la Generalitat y destinar 750 millones de euros a sanidad y educación públicas, ayudas a la discapacidad y dependencia.
En este sentido, Cantó se ha centrado especialmente en la Conselleria de Transparencia porque “es un chiringuito que no sirve para nada” y “supone un coste de 49 millones de euros para todos los valencianos”. Esto va con la línea del PP valenciano, pues la candidata a presidir el Consell, Isabel Bonig, manifestó después de este anuncio que también cree que hay gastos superfluos de “agencias sinsentido”, como la Antifraude y la Agencia Valenciana de Innovación y que para luchar contra la corrupción no hay que tener un organismo independiente, sino reforzar mecanismos internos como la abogacía.
Cantó, así, ha mostrado una reestructuración del Consell. En primer lugar, Presidencia estaría unida a Administraciones Públicas, que engloba Justicia, Administración Pública, Reformas Democráticas y Libertades Públicas; en segundo, Economía, Hacienda y Empleo, con economía sostenible, sectores productivos, comercio y trabajo; finalmente, se mantendrían la de Cultura, Educación y Deporte y cambiaría el nombre de Vicepresidencia e Igualdad y Políticas Inclusivas por Servicios Sociales; Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural por Agricultura; y Sanidad Universal y Salud Pública por Sanidad.
VOX: cambio de modelo
El principal reto con el que VOX se ha presentado al electorado es, precisamente, cambiar de modelo. Entre sus “100 medidas para la España Viva”, se plantea “transformar el Estado autonómico en un Estado de Derecho unitario” para que hay un solo gobierno y parlamento para toda España. Como paso previo, indica, el objetivo es la devolución inmediata al Estado de las competencias de Educación, Sanidad, Seguridad y Justicia “limitando en todo lo posible la capacidad legislativa autonómica”.Se considera, por tanto, que de conseguir una mayoría absoluta a nivel estatal, las consellerias (al menos Educación, Sanidad y Justicia) se disolverían o, al menos, Les Corts valencianes dejarían de funcionar como han hecho hasta ahora. No obstante, otra de sus propuestas estatales que también se ha trasladado al ámbito regional, como ocurre en Andalucía, es la creación de una Conselleria de Familia y Natalidad que se centraría en apoyar la natalidad y a las familias numerosas a través de ayudas.