La Conselleria de Sanidad afirma que actualmente todas las maternidades y paritorios de los hospitales de la Comunitat Valenciana han adecuado sus infraestructuras, según sus posibilidades estructurales, para cumplir con lo establecido tanto en la Estrategia de salud sexual y reproductiva como en el Plan de parto que elija cada mujer.
Así, figura en una respuesta de la consellera Ana Barceló a la diputada de Compromís Mònica Álvaro sobre cómo se han adaptado los espacios para combinar humanización del parto con la garantía de acceso a la prestación de todos los servicios médicos que se puedan necesitar tanto para las madres como para los niños y niñas en la sanidad pública valenciana.
En ese sentido, la Dirección General de Asistencia Sanitaria afirma que la atención al parto, así como todos los servicios médicos necesarios, tanto a madres como a niñas y niños, desde la perspectiva de la humanización está "garantizada de manera universal".
En concreto, los criterios de humanización de la atención al parto se desarrollan en la Estrategia de Salud sexual y reproductiva de la Comunitat Valenciana que, como objetivos específicos, se marca promover la elección "libre y responsable" de la maternidad para un nacimiento "deseado, seguro y satisfactorio".
Asimismo, se fija potenciar el consejo preconcepcional en atención primaria y en los centros de salud sexual y reproductiva, con intervenciones preventivas y de promoción de la salud que contribuyen a mejorar los resultados en salud perinatal.
Además, incluye apoyar a las mujeres y sus parejas en la vivencia fisiológica del embarazo, parto y puerperio facilitando la información y desarrollo de habilidades para que la mujer tenga un "rol activo y participe en la toma de decisiones", así como impulsar la formación en promoción de la salud reproductiva en los diferentes ámbitos profesionales y competenciales.
DERECHOS DEL PLAN DE PARTO
Así, explica que para cumplir con estos objetivos se ofrece a todas las madres la posibilidad de escoger su Plan de Parto que, a su vez reconoce los siguientes derechos: Los servicios de salud
reconocen el derecho a una plena participación de las mujeres manteniendo, a su vez, la máxima seguridad en todo el proceso tanto para la madre como para la criatura en un entorno de calidez como modelo vigente de buena práctica clínica.
Del mismo modo, se recoge el derecho a permanecer acompañada también en los casos de embarazo de riesgo y ante la aparición de complicaciones, incluidas las cesáreas, siempre que clínicamente resulte posible.
Al respecto, se especifica que estos derechos se concretan en que el parto discurra de la manera "más fisiológica, en un ambiente tranquilo y respetando en todo momento la intimidad"; a una atención "personalizada, respetando los deseos de la mujer"; a estar acompañada en todo momento por la persona que la madre decida y a que se presente el equipo profesional que la atienda en el momento del parto.
Asimismo, la parturienta tiene derecho a ser informada en todo momento de los procedimientos, opciones y decisiones de carácter clínico que se vayan produciendo y poder participar de ellas y a favorecer el contacto piel con piel e iniciar la lactancia precozmente.
"Todo ello de manera sensible y respetuosa ante la diversidad cultural, las capacidades físicas, intelectuales y sensoriales de cada mujer", destaca Barceló.