El concejal de Gobierno Interior, Sergi Campillo, ha supervisado las obras de rehabilitación de la Alqueria del Moro de Benicalap, que están en marcha desde el pasado 7 de agosto. El presupuesto de la actuación es de cerca de un millón y medio de euros y el plazo de ejecución de las obras de 12 meses.
«La Alquería del Moro, junto con la de la Torre y el Casino del Americano, constituyen una parte muy importante del patrimonio arquitectónico de Benicalap y de nuestra ciudad. El gobierno de Joan Ribó tiene un compromiso para recuperarlos y conservarlos después de muchos años de abandono y de reivindicación del vecindario y de colectivos que exigían una actuación», ha explicado el concejal de Gobierno Interior, Sergi Campillo.
El presupuesto de la actuación es de cerca de un millón y medio de euros y el plazo de ejecución de las obras es de 12 meses. La Alquería del Moro es una de las más relevantes de la ciudad. De hecho, está catalogada como Bien de Interés Cultural desde 2004. Se trata de un edificio residencial compendio de la arquitectura señorial y rural de la huerta valenciana de los siglos XIV, XVI y XVIII.
El objetivo de esta intervención municipal es que el edificio sirva para mostrar la dilatada historia contenida entre sus muros y forjados, en los cuales se señalarán los hitos más significativos de su historia y de su proceso de permanente metamorfosis.
CENTRE MUNICIPAL DE INTERPRETACIÓN DE L'HORTA
Una vez finalizadas las obras de rehabilitación, la Alqueria del Moro acogerá las dependencias del Centro Municipal de Interpretación de l'Horta, que se considera necesario para dar a conocer y poner en valor el patrimonio agrícola de la ciudad. Pero, además, también tendrá entre sus funciones la de dar servicio a las personas que día a día mantienen nuestro territorio productivo. La idea es que se convierta en un centro de referencia para los agricultores y labriegos de la ciudad.En este sentido, las obras que se acometen, más allá de recuperar el patrimonio arquitectónico de titularidad municipal que cuenta con catalogación BIC, y que estaba en desuso y en proceso de clara degradación, servirá para dotar de nuevas infraestructuras que estarán al servicio de los agricultores y agricultoras.
El centro será gestionado a través de la concejalía de Agricultura i Horta para reforzar el papel del Consell Agrari Municipal como plataforma de servicios para la agricultura municipal. Esta apuesta se ve reforzada por la implementación de una Estrategia Agroalimentaria Municipal..