La construcción de la nueva terminal de norte de contenedores del puerto de València tendrá un coste de 542 millones de euros y un plazo de ejecución de 58 meses, por lo que se prevé que se prolongue hasta 2027, según ha informado la Autoridad Portuaria de Valencia (APV). La entidad ha publicado en su web este proyecto constructivo para que pueda ser consultado.
El proyecto cuenta con informe favorable de Puertos del Estado --dependiente del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana- aunque este organismo realiza a la APV unas recomendaciones antes de la aprobación de la propuesta constructiva. Valenciaport ha asegurado que está "incorporando estas disposiciones", por lo que ha precisado que el proyecto dado a conocer a través de su web "no es el definitivo".
La nueva terminal estará ubicada en las aguas interiores del dique de abrigo de la ampliación norte del puerto de València, cuyas obras finalizaron en 2012 con una inversión de 204 millones de euros --74 de ellos subvencionados con Fondos de Cohesión Europeos--.
El muelle contará con un presupuesto base de licitación estimado de 448 millones de euros a los que hay que sumar el IVA para alcanzar los 542 millones citados. Se estima que atraerá una inversión privada de 1.021 millones de euros. El plazo previsto para la ejecución de las obras es de 58 meses.
"SOSTENIBILIDAD Y CRECIMIENTO"
La APV ha afirmado que la nueva terminal es "un claro ejemplo de infraestructura que compatibiliza sostenibilidad y crecimiento". Así, sostiene que "permitirá seguir ofreciendo un óptimo servicio a la economía española y mantener el carácter interoceánico que garantiza la conectividad con los mercados de los cinco continentes". Tendrá una superficie de unas 137 hectáreas y 1.970 metros de línea de atraque, con capacidad para albergar 5 millones de contenedores.
La entidad ha asegurado que esta instalación será "la más avanzada medioambientalmente del mundo" y un espacio totalmente electrificado -- con suministro eléctrico a grúas y máquinas de patio y a buques portacontenedores--, una circunstancia que "minimizará la emisión de CO2". La electricidad procederá en un 100% de fuentes renovables, lo cual implicará "una reducción del 98% en las emisiones de CO2".
En la misma línea, ha agregado que la automatización, los sistemas avanzados de predicción de tráficos, el diseño de los edificios con criterios de eficiencia energética y la iluminación externa con LED permitirán también reducir el consumo energético. Igualmente, destaca la "importante apuesta por la intermodalidad", con una terminal ferroviaria dotada de 6 vías de 1.000 metros de longitud y con capacidad para mover 305.000 TEUs/año por ferrocarril.
En lo económico, la APV resalta que la nueva terminal creará "nuevos empleos cualificados" y que será "dinamizadora de la actividad económica" de la Comunitat y del resto de España. Así, estima que reforzará la posición en el Mediterráneo y la labor del puerto como "empresa tractor al servicio de la actividad económica española".
El impacto económico de la nueva infraestructura --con una inversión de unos 1.400 millones de euros públicos y privados-- se fija tanto en la fase de construcción como cuando esté en funcionamiento --recuerda que el estudio hecho por el Instituto de Transporte y Territorio de la UPV (ITRAT) indica que en 2030 el impacto económico del puerto representará el 2,27% del conjunto de la Comunitat y que el empleo superará los 44.000 puestos de trabajo--.
La APV ha explicado que Puertos del Estado emitió en marzo un informe favorable sobre el proyecto constructivo del muelle de contenedores de la ampliación norte en València y ha detallado que de él se informó a partir del consejo de administración del 25 de marzo.
El citado organismo hace en documento a la APV las prescripciones y recomendaciones para aprobar el proyecto constructivo, que deberá llevarse a su consejo de administración. El informe señalaba que esta entidad como "promotor y órgano sustantivo de la actuación, deberá emitir certificación de que el proyecto no requiere someterse a un nuevo procedimiento ambiental, con carácter previo a la aprobación".
Puertos del Estado planteaba que el proyecto recoge "todos los elementos de juicio necesarios para emitir dicha certificación" y descartaba la necesidad de un nuevo estudio de impacto ambiental "por no incumplirse ninguno de los supuestos de la Ley 21/2013 de evaluación ambiental", precisa la APV.
No obstante, el organismo estatal matizaba que se debe completar el proyecto con la caracterización de materiales a dragar en el puerto de Sagunto; recomendaba "replantear el entronque del muelle de contenedores manteniendo la cota del último cajón a la cota -20 metros, igual que el resto del muelle y resolver el encuentro con una sección de hormigón sumergido que salve los 2 metros de diferencia entre el muelle y el dique; y concluir el ensayo sobre buques portacontenedores pequeños para asegurar la operatividad de la terminal para una flota lo más amplia posible.
SIN NUEVA DIA
Sobre la necesidad de sometimiento de la propuesta constructiva a evaluación de impacto ambiental simplificada, Puertos del Estado determinó que las distintas modificaciones introducidas respecto al proyecto original evaluado ambientalmente en su día "no tienen efectos sobre el medio ambiente adicionales a los ya considerados", apunta la APV.
Sostiene que "no se dan ninguno de los supuestos establecidos en la letra C del apartado segundo del artículo 7 de la Ley 21/2013 de evaluación ambiental": incremento significativo de emisiones a la atmósfera, vertidos a cauces públicos o litoral; generación de residuos, y uso de recursos naturales, así como afección a Espacios Protegidos Red Natura 2000 y al patrimonio cultural.
ANTIGUO FARO
En el proyecto constructivo de la nueva terminal, la APV contempla la recuperación y el traslado del antiguo faro a un emplazamiento emblemático y próximo a la ciudad de València que está todavía por designar. Ha dicho que esta es una infraestructura que desde hace años no ejerce sus funciones propias, pero subraya la su voluntad de incorporarlo para acercarlo a los ciudadanos.