Los vecinos y vecinas de València ya pueden disfrutar del remodelado paso inferior del túnel que conecta la Gran Vía de Germanías y la de Ramón y Cajal. Tras meses de trabajos para lavarle la cara a la pasarela, que estaba intacta desde su construcción en 1962, desde el consistorio señalan que ya está "plenamente operativa" a falta de una tramitación administrativa.
Tal y como anunció València Extra, a principios de este 2018 han visto la luz unas obras que han cambiado por completo la accesibilidad y la imagen de este paso inferior, y cuyo coste total ha ascendido a 280.000 euros.
Ascensor todavía bloqueado que permite el acceso a la pasarela inferior | P. Plaza
Una de las principales intervenciones tiene que ver con el acceso al paso. Se han instalado dos ascensores que lo comunican con las calles de Cuba y Bailén, uno a cada lado del túnel. El concejal de Movilidad Sostenible, Giuseppe Grezzi, lo anunció como una medida para "hacer una ciudad más inclusiva" y "amable con toda su gente". Sin embargo, la única tramitación administrativa que falta por resolver es la referente a los elevadores, por lo que son la única infraestructura de la pasarela que aún se encuentra inoperativa.
Por otro lado, el consistorio ha puesto solución al problema de la polución y el excesivo y molesto ruido que provoca el tráfico rodado en el túnel. Y lo ha hecho instalando grandes ventanales que aíslan completamente a los peatones de los vehículos, evitando también que la contaminación pueda degradar el interior de la pasarela con el paso del tiempo.
Grandes ventanales que separan el tráfico y la pasarela | P. Plaza
Pero si algo ha modificado por completo el aspecto lúgubre de este paso, han sido la instalación de un falso techo, similar al de la estación de metro con la que conecta, Bailén; la renovación del pavimento y de las paredes y la colocación de nueva iluminación, además de la implantación de un nuevo sistema de ventilación.
Todo esto en cuanto a aspecto, salubridad y accesibilidad. Pero también se ha mejorado la seguridad, gracias a la colocación de diversas cámaras de seguridad y de alumbrado de emergencia y de señalización.
Entrada a la parada de metro de Bailén desde la pasarela | P. Plaza
Con todas estas nuevas prestaciones, la nueva pasarela ya está completamente disponible para los peatones dentro de una intensiva política municipal que insiste en colocar en el centro de la movilidad urbana al viandante con muchas actuaciones, como la peatonalización de diversas zonas de la ciudad de València o la eliminación de las pasarelas elevadas de la Avenida del Cid.