El metro está más cerca que nunca de volver a la zona cero. Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) ha comenzado esta madrugada las pruebas de electrificación en el tramo Torrent-Castelló de Metrovalencia, una de las zonas más afectadas por la DANA del 29 de octubre. Este paso marca un avance decisivo hacia la recuperación total del servicio ferroviario, previsto para el próximo 21 de junio.
Desde octubre, más de una decena de municipios del sur del área metropolitana de Valencia han tenido que adaptar su movilidad a servicios alternativos debido al colapso de más de 50 kilómetros de vía. Ahora, gracias a los avances técnicos de FGV, la circulación de trenes en pruebas anuncia el inminente regreso del metro a la zona cero, donde miles de personas esperan con ansias recuperar su conexión directa con Valencia.
Las pruebas de electrificación comenzaron esta madrugada entre las estaciones de Torrent Avinguda y Castelló, después de que un tren supervisara el trazado para verificar que todas las condiciones eran óptimas para los ensayos. Los trenes circulan durante la noche para compatibilizar los trabajos con las tareas de instalación y rehabilitación que siguen desarrollándose.
A partir de la próxima semana, FGV extenderá estas pruebas al tramo comprendido entre Valencia Sud y Torrent, completando así los casi 50 kilómetros de red que continúan fuera de servicio. Si todo avanza según lo previsto, el 21 de junio se restablecerá la circulación completa en la línea que conecta Valencia con los pueblos de la Ribera y l’Horta Sud, recuperando por fin la normalidad ferroviaria tras siete intensos meses de trabajo.
Una inversión de más de 11 millones
La fase de pruebas arranca una vez finalizadas las grandes obras de rehabilitación que FGV ha ejecutado con una inversión total de 11,6 millones de euros. En este tiempo se han solucionado cerca de 100 incidencias de diversa índole a lo largo del trazado, que discurre por Paiporta, Picanya, Torrent, Picassent, Alginet, Carlet, Benimodo, L’Alcúdia, Massalavés, Alberic y Castelló.
Las actuaciones han incluido la reparación de la superestructura de la vía, reconstrucción de canalizaciones eléctricas y de telecomunicaciones, mejora del drenaje, reposición de cerramientos y vallados, así como la completa electrificación de la línea, clave para que el metro pueda volver a circular de forma segura y eficiente.
Debido a las pruebas eléctricas, FGV ha lanzado una advertencia de seguridad a la ciudadanía: la catenaria lleva tensión de 1.500 voltios, por lo que cualquier contacto directo o indirecto (a través de objetos metálicos como alambres o hierros) puede provocar un grave accidente por electrocución. La empresa insta a extremar las precauciones mientras se realizan estos ensayos.
El conseller de Transportes, Vicente Martínez-Mus, ha reafirmado el compromiso del Consell con el regreso del metro a los municipios afectados, asegurando que ni el robo de más de 10 kilómetros de cable de cobre ni otros contratiempos retrasarán los plazos. “La gente lleva muchos meses esperando y el 21 de junio volverán a tener su metro. Estamos cumpliendo”, ha declarado.
La reanudación de la circulación en el tramo Paiporta-Castelló no solo devolverá la normalidad al transporte público, sino que supone un impulso vital para la movilidad y conectividad metropolitana de la zona DANA.