El vicesecretario general del PSPV y portavoz socialista en Les Corts, Manolo Mata, ha afirmado este martes que "la vida no es blanca o negra y la relación con el puerto no es blanca o negra", por lo que todos los agentes "tienen que ser comedidos y no asustar a los posibles inversores" porque se puede apostar por una ciudad "sostenible, diversa y plural" que respalde una actividad económica "sin destrozar el medio ambiente".
Así se ha pronunciado Mata al ser preguntado sobre su opinión respecto a la petición de paralización de la ampliación norte del Puerto de Valencia --cuya construcción ha sido adjudicada al gigante naviero suizo MSC-- hasta que el Ministerio de Transición Ecológica elabore una nueva Declaración de Impacto Ambiental (DIA) sobre el proyecto que aclare si este es "viable" y "compatible" con la sostenibilidad medioambiental, como ha pedido Compromís.
Mata ha resaltado que el dique de abrigo ya está acabado y no sabe si ahora toca o no realizar una nueva DIA, una cuestión que tendrán que ver los técnicos, pero ha recordado que la ampliación efectiva ya tiene los informes medioambientales del Ayuntamiento de València y la Generalitat.
Ha resaltado que hay que hablar de este tema en serio y eso supone "no poner condiciones". "Estamos en una nueva situación de ver cómo las cosas son sostenibles y también respetar las actuaciones que se han hecho en esa apuesta por el futuro. Hay mucho debate y condicionar a una nueva DIA del Ministerio sobre el abrigo no es una cuestión pacífica, hay gente que quiere y gente que dice que como está acabado es innecesaria", ha indicado.
Ha subrayado que es un tema "técnico, no de voluntarismo político ni de buenismo, es una cuestión muy complicada y condicionar a una nueva DIA y paralizar la ampliación no es una postura adecuada". Para Mata, "hay que valorarlo todo y ver si el propio puerto, que tiene sus propios técnicos, considera que lo que va dentro del abrigo, que está acabado, merece una nueva DIA".
Ha incidido en que el puerto de València es "estratégico" y si no lo es pueden serlo el de Tarragona o el de Algeciras y el propio alcalde de Cádiz, José María González 'Kichi', "defiende la economía de la ciudad".
Para el dirigente socialista, el problema con el puerto de València es que "tiene una deuda histórica de cuando se comió la playa de Nazaret" y "no la ha pagado nunca", pero ha subrayado que "se está actualizando" y, por ejemplo, prevé una subestación eléctrica a la que puedan conectarse cruceros, evitando que tengan que funcionar con gasoil mientras estén atracados, algo "muy importante" a nivel medioambiental.