Fundada en 1999, la ONG AIDA (Ayuda, Intercambio y Desarrollo) nació como un proyecto que después de considerar las condiciones de pobreza de algunos países asiáticos, decidió involucrarse y ayudar. El primer país en el que incidió fue Vietnam, donde impulsó la acuicultura, el cooperativismo y el desarrollo rural.
Actualmente, la organización apunta a poblaciones de países en vías de desarrollo de África, América y Medio Oriente. Aida se focaliza en temas sociales, desarrollo sustentable, medioambiente, ecología, educación, inmigración, empleo y salud, aspectos en los que colabora con fondos de distintas iniciativas.
Esta librería es una de ellas. Con locales en Madrid, Donostia, Barcelona y Valencia, entre otros, se ha transformado en una alternativa económica y solidaria al mismo tiempo. En Valencia sus locales están ubicados en pleno barrio de Benimaclet (Molinell 14) y en la calle Moratín 11, abierta hace un par de años. Ambos conforman un referente cultural que atrae a turistas y valencianos por igual.
La era está pariendo un corazón
Aida Books & More no es una librería convencional. Es la primera librería solidaria de España. En primer lugar, considera que lo mejor que puede pasar a los libros va mucho más allá de botarlos o dejarlos descansar en los estantes de casa. Su idea fundamental es que se vuelvan a leer una y otra vez, lo que permite generar una circulación constante.
¿Cómo funciona? Con donaciones de libros usados que, ubicados en los anaqueles correctamente clasificados, permiten la circulación de literatura especializada, manualidades, novelas o poesía, entre otros géneros. Por supuesto, también hay libros en valenciano.
Día a día, los voluntarios de la librería reciben libros de distinto tipo. Al venderlos a muy bajo precio, fomentan los proyectos de AIDA y permiten que niños de Guinea Bissau y otros países puedan ser trasladados a hospitales de Europa para ser operados de enfermedades coronarias difíciles de tratar en sus lugares de origen.
Este modelo solidario ha permitido fomentar el saber y la conciencia social al mismo tiempo. Una iniciativa digna de imitación que crece día tras día y que rinde homenaje a la cultura de la reutilización y la solidaridad.