Un campeón sin Feninde?

Las tensiones institucionales entre la Federació de Pilota Valenciana y la Fundació per la Pilota Valenciana pueden desembocar en una situación inédita: un campeón del Individual sin Feninde. Podría ser el caso, por ejemplo, de Alfonso Moltó. El jugador de Barxeta, hasta ahora ganador de cuatro campeonatos del mano a mano de raspall, opta este año a su quinta victoria después de imponerse en 2015, 2016, 2018 y 2019. Hay que recordar que este trofeo, el título que premia a los grandes campeones del Individual, sólo se puede conseguir con tres victorias consecutivas o cinco alternas. En caso de repetir por quinta vez en la actual edición del campeonato (de momento está en cuartos de final), ¿podrá Moltó levantar la llamada Feninde?

Lo tiene complicado, porque la Feninde es un título que libra desde los años 90 la Federació de Pilota Valenciana, institución que, hoy por hoy, no reconoce cómo oficial el actual campeonato Individual. A ojos federativos, el mano a mano que ahora está disputándose no tiene ninguna validez. Por lo tanto, Moltó podría ser el primero penta campeón del Individual sin friso.

La Feninde es un trofeo de bronce de unos 20 kilos en el cual se reproduce un grabado de la antigua Grecia. Víctor Iñúrria, presidente de la Federació de Pilota Valenciana allá por los años 80, identificó en esta escultura, la cual localizó en un museo de Atenas, una representación de una partida de largas. Sería la prueba que la pelota a mano ya se practicaba en la época clásica. Desde que se puso en marcha el campeonato Individual-Trofeo Presidente de la Generalitat (en homenaje a Joan Lerma, quién intervino para llevar el friso original hasta Valencia), la Feninde es el título con el cual la Federació premia los grandes campeones del mano a mano. El primer jugador al ganar la Feninde en propiedad fue Paco Cabanes "Genovés", en 1991.

Desde aquel momento, la Federación encarga la producción de este friso de bronce con una técnica artesanal compleja: la cera perdida. Este proceso requiere de la creación de un molde de cera que acaba sirviendo para dar forma un metal, en este caso el bronce. Debido a su dificultad y a los elevados costes económicos, son pocos los artesanos que continúan trabajando estas técnicas.

Con todo, este año, el friso griego será el grande ausente en las final de la competición. A no ser que la Fundació por la Pilota Valenciana asuma la producción del trofeo y reemplazo a la Federació en su entrega.

La situación de Moltó se traslada a todos los jugadores que compiten en el actual Individual, organizado por la Fundació. Cómo que la Federació no ha oficializado el campeonato (no se han firmado los convenios pertinentes), la actual competición no computa en su historial. Y así se mantendrá mientras no se firmo la esperada "paz" con la Fundació. De esta manera, ni Puchol II en escala y cuerda, ni Tonet IV en raspall, podrán aumentar su cuenta particular para conquistar su segunda Feninde. Una hipotética victoria este año no los computará. No, al menos, para la Federació.

Tal como informó Volea, el pasado lunes 15 de mayo se celebró una reunión entre los presidentes de la Federació y la Fundació, con el director general del Deporte, Josep Miquel Moya, para empezar a buscar soluciones en la actual situación, bloqueada desde hace muchas semanas. Desde aquel momento poco ha cambiado. El contacto entre las dos instituciones responsables de la gestión de la pelota es prácticamente nulo.

Mientras tanto, el campeonato Individual de raspall y escala y corda continúa.