La Comunidad de Propietarios del Residencial Nicet Patraix ha denunciado al Ayuntamiento de Valencia la actuación de la empresa Grupo MContigo, S.L., por la instalación de un sistema masivo de videovigilancia ilegal en plena vía pública y por el mantenimiento de una explotación clandestina de inmuebles sin licencia turística y en contra de los estatutos comunitarios.
Esta mercantil finalizó ayer la colocación de veinticuatro cámaras orientables ancladas en las rejillas de ventilación de los bajos comerciales de la Avenida José Roca Coll, sin autorización y sin presentar los permisos administrativos necesarios a la comunidad. La instalación apunta directamente hacia la acera y afecta a la intimidad de cualquier ciudadano que transite por la zona, lo que supone un riesgo evidente para la privacidad y la convivencia vecinal.
A esta situación se suma la explotación irregular de los locales como supuestos apartamentos turísticos. El Registro de Turismo de la Comunitat Valenciana confirma que las veinticuatro licencias vinculadas a estos inmuebles caducaron entre mayo y junio de 2025 y fueron dadas de baja definitivamente el 8 de septiembre del mismo año por resolución de la Conselleria de Turismo. Pese a ello, Grupo MContigo continúa anunciando y alquilando los bajos en plataformas digitales, en abierta vulneración de la Ley de Turismo, Ocio y Hospitalidad y en desobediencia al acuerdo estatutario de la comunidad, que desde mayo de 2024 prohibió cualquier tipo de alojamiento turístico en el complejo.
El pasado 18 de septiembre, la Comunidad de Propietarios remitió un requerimiento formal a la empresa Grupo MContigo para que cesara de inmediato toda actividad turística en los locales comerciales situados bajo las viviendas de 147 familias y acatara la baja definitiva de las licencias de los 24 inmuebles decretada por la Conselleria de Turismo. Dicho requerimiento no ha sido atendido, lo que abre la vía para el inicio de nuevas acciones administrativas y judiciales contra esta mercantil por desobedecer de forma reiterada la normativa vigente.
Los propios turistas que han reservado en estos alojamientos han comenzado a denunciar abiertamente su experiencia en la plataforma Booking.com, donde siguen apareciendo anunciados los bajos de Roca Coll MSuites a pesar de carecer de licencia turística.
Martin, un visitante francés, ha relatado que abandonó el apartamento tras una sola noche debido a las pésimas condiciones. Según expone en su comentario en Booking, «cuando llegamos no habían hecho la limpieza, eran las 16 horas, y nos dijeron que saliéramos a comer o beber algo mientras la hacían. El apartamento estaba rodeado de una veintena de alojamientos turísticos gestionados por la misma empresa y, tras apenas una hora, varios vecinos nos advirtieron de la ilegalidad de estos inmuebles, lo que confirmamos en la prensa local». Martin concluye su testimonio con un mensaje rotundo: «huye, acabo de perder más de 350 euros para nada».
También Cloé, otra visitante francesa que se alojó en solitario en Roca Coll MSuites, describe su experiencia como una “mala relación calidad-precio”. En su reseña denuncia la ausencia de asistencia por parte de los administradores, la basura acumulada en la puerta, la televisión que no funcionaba, la falta de agua caliente a la llegada y el ruido constante por estar ubicado en una rotonda.
Por su parte, Petkova, procedente de Bulgaria, advierte de que el estudio es «ruidoso, sin luz y sin aire». Señala que se encuentra en la planta baja, directamente sobre la acera y frente a un solar en obras, lo que provoca ruido incesante desde las 7:30 de la mañana con maquinaria pesada y alarmas. Denuncia además la falta de aislamiento acústico, corrientes de aire entrando bajo la puerta, la negativa de los gestores a cambiarla de alojamiento o devolverle el dinero, e incluso la entrada no autorizada de una persona en la habitación sin cerrar después con llave, supuestamente para comprobar la instalación de un WiFi. En su comentario añade haber recibido un folleto que reconoce que la propiedad no tiene licencia turística.
Estos testimonios, accesibles públicamente en Booking, refuerzan las quejas vecinales y ponen de manifiesto el grave perjuicio que la explotación irregular de 24 bajos comerciales sin licencia turística está causando a la convivencia del barrio y a la imagen de Valencia como destino internacional.
La comunidad vecinal alerta además de que esta actividad ilícita está generando molestias constantes, acumulación de basuras y un uso indebido de los locales como trasteros, lo que está deteriorando la convivencia y la seguridad en el barrio. “Estamos ante un problema de orden público, de seguridad ciudadana y de vulneración de derechos fundamentales”, denuncia Miguel Roig, presidente de la Comunidad Nicet Patraix.
Por todo ello, la Comunidad de Propietarios exige al Ayuntamiento de Valencia que proceda a la retirada inmediata del sistema de videovigilancia instalado sin autorización, la paralización y precinto de toda actividad turística ilegal y la apertura de expedientes sancionadores contra Grupo MContigo y sus sociedades vinculadas.
“No vamos a permitir que nuestro residencial se convierta en un hotel encubierto ni en un espacio sometido a vigilancia ilegal. Defenderemos nuestros derechos y la tranquilidad del vecindario hasta las últimas consecuencias”, concluye Miguel Roig.