Valencia se centra en la mejora de la movilidad de la ciudad, apostando por la sostenibilidad. De esta manera, además de la creación de nuevas conexiones ciclistas, también se está trabajando en la mejora de la red actual. Así, desde el área de Movilidad del Ayuntamiento de Valencia, liderada por el concejal Jesús Carbonell, se ha informado que ya se han iniciado los trabajos en las conexiones ciclistas de los distritos de Jesús, l’Olivereta, Quatre Carreres y Rascanya.
Así, como ha explicado Carbonell, en un comunicado de prensa, “la construcción y puesta en servicio de estos cuatro proyectos de mejora permitirá ensanchar el carril bici de la calle dels Carters, mejorar las conexiones ciclistas de la avenida d’Alfauir con Primat Reig y bajar a calzada tramos del carril bici de la calle de Burgos y de la avenida de la Plata (a la altura de Sapadors y de Amado Granell Mesado) recuperando, así, el espacio peatonal.
Se trata de proyectos aprobados en los presupuestos participativos de DecidimVLC 2020-2021, que supondrá una inversión de 16.577 euros, y un periodo de ejecución de cuatro meses.
No obstante, no es el único proyecto para la mejora de las conexiones sostenibles que se desarrollará en la ciudad de Valencia. De hecho, cabe recordar que, el pasado mes de noviembre, el gobierno municipal adjudicaba la redacción de la creación de un carril ciclopeatonal de 1.200 metros cuadrados, que conectará el barrio de Natzaret y Las Moreras con el distrito de Camins al Grau.
Una conexión para ciclistas y peatones que conectará todo el recorrido ciclista del cauce del río hasta el Puente de Astilleros y posteriormente con el parque de Desembocadura. De esta manera, la ciudad contará con una conexión ciclopeatonal desde el parque de Cabecera hasta el parque de Desembocadura. En este sentido, el proyecto incluirá completar todos los tramos ciclistas del antiguo cauce del río Turia.
¿En qué consistirá el proyecto?
Con un plazo de ejecución de ocho meses, este proyecto se realizará a través de un camino que deberá salvar el cauce de aguas mediante una pasarela ligera que unirá la calle del Tres de Abril de 1979 con el vial de servicio del CIP Centro de Investigación Príncipe Felipe y que atravesará el puente de ferrocarril por su paso inferior, de forma que se mejorará y renaturalizará este espacio.
El proyecto, cofinanciado por el Ayuntamiento de València y la Generalitat Valenciana, incluye una pasarela ciclista de 30 metros de longitud que unirá las dos zonas. “Sin duda se trata de un proyecto donde se une la sostenibilidad, la accesibilidad y que supone un reflejo de todo el trabajo que durante este año se ha desarrollado en nuestra ciudad dentro del año de la capitalidad verde”, apuntaba el concejal de Urbanismo, Juan Giner, en un comunicado de prensa.
La pasarela, posteriormente, se conectará con los itinerarios existentes en la urbanización del PAI de Las Moreras desdoblando los itinerarios ciclistas y peatonal hasta el final de la urbanización para alcanzar el Puente de Astilleros. Posteriormente, el trazado del carril conectará con las obras del futuro Parque de Desembocadura en las que se deberá pasar por debajo del Puente de Astilleros.
El nuevo itinerario contará con una anchura de 5 metros integrada en una plataforma única con carril reservado para bicicletas de 2 metros de anchura con 2 carriles de circulación. El camino contará con zonas de descanso con un banco cada 50 metros, según normativa de accesibilidad.
La inversión para ejecutar este carril ciclopeatonal será de 1.442.528 euros.
Carril bici de Gaspar Aguilar y Sant Vicent Màrtir
Además, Valencia ha aprobado el proyecto de construcción de 3,2 kilómetros más de carriles bicis enclavados dentro de los barrios de Arrancapins, Patraix, Favara, La Raïosa, Creu Coberta y Sant Marcel·lí, y sumará alrededor de 3.100 metros de red ciclista al sur de la ciudad. Las obras tienen un coste total de 2.650.956,60 euros (2.190.873,22 a los que se suman 460.083,38 de IVA) y son concesionarias de una ayuda del 90 % de su presupuesto base a través de los fondos europeos Next Generation.
El itinerario ciclista del carril bici de Gaspar Aguilar discurrirá por la totalidad de la avenida, entre la plaza de Jesús y Doctor Tomàs Sala, conectando con los carriles bici de la calle Jesús, Jeroni Munyós-Beat Nicolau Factor, Llanera de Ranes y Tres Creus - Doctor Tomàs Sala. El trazado de este carril bici bidireccional de 1.200 metros discurrirá segregado por la calzada pegado a la acera este, entre ésta y un carril de aparcamiento en cordón. En esta avenida, además, se pretende realizar una reestructuración de los carriles de circulación, manteniendo los dos carriles dirección Doctor Tomàs Sala y reduciéndose a un solo carril el sentido hacia Campos Crespo. Además, se dispondrá de mayor espacio peatonal en el entorno, se mejorará la accesibilidad y se ejecutarán dos nuevos pasos de peatones semaforizados.
Por su parte, el de Sant Vicent Màrtir el nuevo carril bici discurrirá desde la intersección con Mestre Sosa y hasta la avenida Doctor Tomàs Sala, conectando con los carriles bici de sendas vías, y con los de Giorgeta y Dolores Alcaide. El trazado de este carril bici bidireccional de 1.600 metros discurrirá, fundamentalmente, segregado sobre la calzada y pegado a la acera oeste. En este caso, y al igual que en la primera zona de actuación, se realiza una reestructuración de los carriles de circulación, reduciéndose a un solo carril la dirección hacia Doctor Tomàs Sala, entre Giorgeta y el bulevar sur.
Pacificación del tráfico
Asimismo, otra de las patas principales para la creación de una ciudad más sostenible es la pacificación del tráfico rodado. En este sentido, desde el equipo de gobierno municipal no solo se creó, el pasado mes de septiembre, el primer ciclobarrio de Valencia en Ruzafa con limitación de 20 km/h para vehículos; sino que desde el área de Movilidad ya se estudia la implantación de la zona naranja como única alternativa de aparcamiento en el barrio de Arrancapins.
Como explicaba Carbonell, en Cadena Ser, “esta modalidad de aparcamiento no merma los derechos de los residentes, pero sí que evita que aquellos que no lo son generen tráfico en la zona buscando plaza”. Y es que para el concejal de Movilidad, la zona verde – como reclaman algunos vecinos para sus barrios, como es el caso de la Petxina – no sería una solución muy eficiente, ya que “un porcentaje elevado de las plazas están vacías durante el día debido al desplazamiento de los vecinos”.
En estos momentos, se están elaborando el estudio de la zona naranja en Arrancapins, que se presentará a los vecinos y vecinas antes de su implantación.