La consejera de Transición Ecológica, Mireia Mollà, ha declarado "histórico" el acuerdo conseguido con la Confederación Hidrográfica del Júcar para incluir "por primera vez en la planificación hidrológica una reserva de caudal ecológico para la Albufera de 60 hectómetros cúbicos no supeditado ni condicionado a otros usos, o a otros extremos".
Mollà, acompañada del alcalde de València, Joan Ribó, del vicealcalde, Sergi Campillo, y de la secretaria autonómica de Emergencia Climática, Paula Tuzón, se ha mostrado "tremendamente satisfecha" por el pacto que "por fin coloca a la Albufera en el lugar que merecía ocupar, como referente y protagonista".
El acuerdo conseguido refleja aportaciones específicas de carácter ambiental, entre el 15 de octubre y el 15 de mayo. El agua procede de las obras de modernización de la Acequia Real del Júcar, tanto las ya ejecutadas cómo las previstas en los diferentes sectores, que suman 40 hectómetros cúbicos, a las cuales se añaden 10 hectómetros cúbicos directos del Júcar y otros 10 hectómetros cúbicos del Túria.
"Ahora hemos conseguido que de las obras de modernización que se han realizado hasta ahora, las consignaciones vayan sí o a la sí Albufera, que el agua procedente de las obras pendientes vaya a la Albufera y que los 20 hectómetros cúbicos de aportaciones directas vayan indiscutiblemente a la Albufera", ha subrayado Mollà.
El alcalde de València, Joan Ribó, ha señalado que este acuerdo "consolida una mejora cada día mayor de la Albufera, además de conseguir algo que nunca hasta ahora se había conseguido", en referencia al caudal ecológico de 60 hectómetros cúbicos.
La consejera ha coincidido con el alcalde a remarcar que esta aportación hídrica supondrá un "antes y uno después" para el humedal de agua dulce más importante de Europa, que se verá reforzado por las obras asociadas al Plan Integral de la Albufera: el nuevo colector oeste y la nueva depuradora que cuenta con una consignación presupuestaria de 110 millones de euros y la redacción de los cuales está ya licitada.
Paula Tuzón ha hecho hincapié en la garantía ambiental de las aportaciones de agua que rebajan la tensión ecosistèmica del humedal y "entienden el Parque cómo un enclave ambiental de primer orden, sin condicionantes".