La Ley Valenciana LGTBI en las escuelas: el primer paso para un futuro igualitario y sin discriminación

Hui entra en vigor aquesta llei pionera i, amb ella, les generacions valencianes més joves estudiaran la diversitat d’orientacions sexuals, familiars, de gènere i de desenvolupament sexual

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Las aulas son, junto al hogar, el espacio que más influye en la formación del identitario de cada persona. Y es que el poder de la educación quedará más claro que nunca a partir de hoy, con la entrada en vigor de la Ley Valenciana para la Igualdad de las personas LGTBI, una normativa donde las nuevas generaciones valencianas serán claves para conseguir su objetivo: garantizar la igualdad y no discriminación de lesbianas, gays, transexuales, bisexuales e intersexuales.

Esta ley pionera tendrá especial incidencia en el ámbito educativo y partirá de la base de que "toda persona tiene derecho a recibir una educación en condiciones de igualdad, sin exponerse en ninguna discriminación por motivos de orientación sexual, identidad de género, expresión de género, desarrollo sexual o grupo familiar".

Así, la Conselleria velará porque el sistema educativo sea un espacio seguro, respetuoso y libre de cualquier discriminación y aplicará políticas para garantizar la igualdad en la diversidad, a partir de los estudios que hará con las universidades valencianas sobre la situación del colectivo LGTBI en el ámbito educativo.

Uno de los aspectos más destacados será la incorporación de contenidos sobre diversidad de orientaciones sexuales, identidades y expresiones de género, familiar y de desarrollo sexual. En concreto, se hará de forma transversal en todas las asignaturas, áreas y módulos de currículum para garantizar un mejor conocimiento de esta realidad diversa.

Otro de los puntos fuertes será el de la elaboración de programas y guías de educación sexual sobre estos temas diferenciados por niveles educativos y bajo criterios estandarizados, desde un punto de vista científico, objetivo y no doctrinal, según indica la misma ley.

Por otro lado, se establecerán protocolos de prevención, acompañamiento e intervención ante supuestos de acoso o violencia motivados por LGTBIfobia y se facilitará información sobre los mecanismos de denuncia. En este sentido, será clave la formación del personal docente no universitario para integrar el tratamiento de la diversidad en su tarea y prevenir, identificar y eliminar prejuicios basados en una concepción binaria y heteronormativa de la sexualidad.

Educación también en las universidades

Las universidades también serán centros con un papel destacado. En concreto, se llevarán a cabo acciones informativas, divulgativas y formativas para prevenir, detectar y evitar acciones de discriminación o acoso y como elemento destacado, podrán crear oficinas de atención e información para las personas del colectivo LGTBI.

Así mismo, tendrán que apoyar a la realización de estudios y proyectos de investigación sobre la situación de la diversidad sexual, de identidades y expresiones de género, familiar y de desarrollo sexual en todas las vertientes y ámbitos sociales y se promoverán grupos de investigación especializados en la realidad de lesbianas, gays, transexuales, bisexuales y intersexuales.

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