La capa de invisibilidad, que tan famosa se ha hecho en las películas de Harry Potter, ha dejado de ser ficción para convertirse en una realidad. Investigadores de la Universidad Politécnica de Valencia, junto con investigadores de la Universidad Pública de Navarra, han dado un paso muy significativo con la creación de una nueva capa de invisibilidad, que permitirá ocultar objetos en ambientes difusos.
Hasta ahora, las capas desarrolladas sólo eran capaces de ocultar objetos con una iluminación permanente. Sin embargo, con este nuevo diseño, el funcionamiento de esta capa trabajará correctamente tanto en situaciones de niebla, lugares con humo o aguas turbias, como en el tejido orgánico. Este nuevo avance asienta las bases para hacer indetectable un avión entre la niebla o un submarino en el mar.
Hace, aproximadamente, una década que se propuso esta idea y, desde entonces, los científicos comprobaron la dificultad de crear este dispositivo. Sin embargo, recientemente, al descubrir que esa dificultad desaparecía si el objeto a ocultar permanecía en un ambiente difuso, han podido comprobar que resulta relativamente sencillo crear capas de invisibilidad de tamaño macroscópico, que funcionan para cualquier dirección de luz y en un gran ancho de banda.
Los investigadores de ambas universidades han realizado una simulación de esta nueva capa de invisibilidad y, próximamente, comenzarán con su construcción a nivel de laboratorio.