València relanza los presupuestos participativos: “con el voto en contra se evitan proyectos con poco apoyo ciudadano”

Hablamos con la concejala de Participación de Valencia, Julia Climent, sobre el nuevo proceso de presupuestos participativos y las novedades

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Gente en la plaza del Ayuntamiento de València
Gente en la plaza del Ayuntamiento de València

Con el objetivo de dar un nuevo impulso a los presupuestos participativos de València, el actual equipo de gobierno ha introducido cambios significativos en el proceso: desde una imagen renovada y una plataforma más accesible hasta la incorporación del voto presencial y la opción de rechazar propuestas. 

Hablamos con Julia Climent, concejala de Recursos Humanos y Técnicos, Participación y Acción Vecinal y Pedanías del Ayuntamiento de Valencia, para conocer los motivos de esta renovación, las novedades de la octava edición y cómo se está gestionando la ejecución de proyectos anteriores.

Se podría decir que habéis llevado a cabo una renovación integral del proceso de presupuestos participativos de Valencia, ¿por qué era importante?

Pues mira, nos parecía importante porque queríamos darle un nuevo impulso a los presupuestos participativos. Esta es la octava edición, ya se han hecho siete, pero cuando llegamos al Ayuntamiento decidimos hacer un paréntesis, reflexionar y luego empezar a trabajar en una nueva imagen.

Había dos cosas muy importantes para relanzar los presupuestos participativos. Por un lado, la plataforma web, la tecnológica. Nos parecía fundamental trabajar en ella para que fuera más fácil de usar para la ciudadanía, pensando en vecinos y vecinas que quizá no se manejan bien. Que fuera fácil, intuitiva, colorida, explicativa, paso a paso. Para eso se lanzó una licitación y se adjudicó un contrato a una empresa que está trabajando en ello.

Y luego, otra cosa muy importante: una licitación para todo lo que es publicidad, difusión, comunicación, etc. Porque nos parecía esencial que la herramienta fuera fácil de manejar, y también que la información llegara a cuanta más gente mejor. Estamos en plena campaña de difusión y trabajando en la plataforma tecnológica. El resultado es la creatividad y el diseño que han hecho: 

Presentación presupuestos participativos Valencia 2025
Presentación presupuestos participativos Valencia 2025

Queríamos que fuera colorido, que la gente se identificara con esa imagen. Si te fijas, son como notas, post-its, que utilizaremos para ir poniendo información en cada fase. Usamos la misma imagen, pero con distinta información a medida que avanzamos por las cuatro fases del proceso. Por eso, ese cambio de imagen nos parecía importante: un nuevo impulso a los presupuestos participativos.

Una de las novedades es que se ha eliminado la necesidad de registrarse para poder participar, ¿esto lo hace más accesible?

Sí, sin duda. En la línea de que la plataforma fuera más accesible, nos dimos cuenta, todos los que participamos en ediciones anteriores, de que el hecho de tener que registrarte, recibir un correo, darte de alta, hacía que mucha gente desistiera. Así que uno de los objetivos principales era la simplificación: que con tu DNI y la dirección de tu domicilio puedas ya empezar a registrar propuestas. Luego, los técnicos comprueban que eres mayor de 16 años y estás empadronado en Valencia, que son los dos requisitos para poder participar.

Otra de las características es que se ha incorporado un voto presencial que abre la puerta a la participación, especialmente, de personas mayores, ¿ya sabéis dónde se ubicarán? 

Ese también era uno de los métodos que teníamos en mente para ampliar la participación. Muchas personas, sobre todo mayores, prefieren participar de forma presencial. Se implementará en la última fase, la cuarta. Estamos trabajando en las ubicaciones, y la idea es hacerlo en las juntas municipales, porque tienen instalaciones, están distribuidas por todos los distritos de Valencia, y están los secretarios y secretarias que pueden dar fe del procedimiento. Estamos valorando habilitar otros lugares, siempre que cumplan con esos requisitos de vigilancia y garantía del proceso.

Eliminar el registro ha sido clave para simplificar el proceso y animar a más gente a participar

Y otro de los puntos que más ha llamado la atención es el voto en contra, ¿se aplicará en la votación final? ¿Habrá un máximo de votos negativos para desechar una propuesta?

Sí, se aplicará en la votación final. En las bases generales todavía no está especificado, estamos trabajando en ello. Nos parecía importante incluir esta opción por varios motivos: muchas personas que han participado nos decían que les hubiera gustado poder votar que no a algunas propuestas, y esa posibilidad no existía.

Hemos visto que grandes ciudades como Madrid o Cascais (Portugal), con experiencia en presupuestos participativos, tienen voto negativo. Queremos implementarlo para aportar más matices al proceso democrático. 

Ahora, lo que estamos valorando es cómo computará ese voto: si valdrá lo mismo que uno positivo, o si tendrá un peso proporcional. Aún no está decidido, lo estamos estudiando y concretaremos en próximas resoluciones.

En esta edición, ¿las propuestas que presenten las juntas de distrito pasarán directamente a viabilidad técnica?

Queremos hacerlo así, porque son propuestas ya trabajadas en las juntas municipales, con técnicos implicados. Ya hay una experiencia importante en estos grupos de trabajo, y eso permite que puedan pasar directamente a la fase de viabilidad.

El anterior equipo de gobierno, a raíz de una petición de las asociaciones vecinales, se planteó que las votaciones se hicieran por barrios y no por distritos para garantizar que las inversiones llegasen también a los barrios más pequeños, ¿se contempla esta opción?

Estamos trabajando en ello. Es cierto que a un barrio grande le resulta más fácil sacar adelante un proyecto porque tiene más votantes. De momento, hemos distribuido los 16 millones de euros entre los barrios de forma objetiva, según criterios de población y renta, a través de la Oficina de Estadística del Ayuntamiento.

Lo que estamos valorando es que en la fase de votación, si los barrios más pequeños no consiguen los votos suficientes, se active algún sistema de reequilibrio que garantice que al menos una propuesta por barrio pueda ser aprobada. Es decir, establecer un mecanismo que asegure inversiones equitativas.

Gente andando por las calles de Valencia
Gente andando por las calles de Valencia

¿Se mantendrá la bianualidad en los presupuestos participativos?

En principio sí, porque lo consideramos positivo, sobre todo para los técnicos. Una convocatoria anual implica muchos recursos. Hacerlo bianualmente permite optimizar esos recursos y optar a proyectos más grandes, ya que el presupuesto es mayor: 16 millones en lugar de 8. Es beneficioso tanto para la tramitación interna del Ayuntamiento como para los propios proyectos.

Porque, cuando entrasteis al gobierno, ¿os encontrasteis con muchos proyectos acumulados?

Eso es lo que pasó. De hecho, ese fue uno de los motivos por los que en 2024 no se lanzó una convocatoria. Hicimos un paréntesis para repensar la plataforma, lanzar una buena campaña de promoción y, sobre todo, revisar cuántos proyectos estaban pendientes. Había 259 proyectos de presupuestos participativos sin ejecutar. Por responsabilidad y transparencia, decidimos no seguir acumulando más.

Desde entonces, hemos ejecutado o estamos ejecutando 159 de ellos, por lo que quedan unos 100 pendientes. Esto nos da cierto margen para afrontar esta nueva edición con una base más sólida.

¿Habéis encontrado proyectos obsoletos o que no se adaptaban a la situación actual?

La mayoría eran viables, aunque excepcionalmente hemos encontrado algunos que no lo eran. Por ejemplo, proyectos que se solapaban con otros ya en marcha o zonas donde no se podía actuar por cuestiones técnicas (como un carril bici previsto donde se proponía una ampliación de acera). Pero han sido los menos. En general, los proyectos estaban bien analizados y se están ejecutando o comenzarán pronto.

¿Crees que con este nuevo modelo, y especialmente con la incorporación del voto en contra, se pueden evitar proyectos polémicos como el de la calle Colón?

Absolutamente. Ese fue un proyecto polémico que salió adelante con el apoyo de muy poca gente, simplemente porque no existía la posibilidad de votar en contra. Con esta nueva opción, se podrán evitar proyectos que no tienen un respaldo amplio de la ciudadanía.

Vamos a garantizar que todos los barrios tengan, al menos, una propuesta aprobada

Puede parecer un proyecto sencillo, pero requiere de una importante coordinación entre todas las áreas del Ayuntamiento...

Totalmente. Por eso nos parece esencial conocer cuanto antes los proyectos finalistas —será en septiembre— para que puedan incluirse en el presupuesto del año siguiente. La idea es coordinar bien la aprobación ciudadana con la planificación presupuestaria de cada área.

Ya por último, ¿por qué son tan importantes los presupuestos participativos?

Porque es una herramienta que funciona muy bien. Las grandes ciudades, y también muchas medianas, llevan varias ediciones haciéndolo. Es una buena fórmula de participación ciudadana: decidir parte de las inversiones municipales. Es muy democrático, muy sano, y creo que con el tiempo se irá afinando y mejorando. Lo importante es que la ciudadanía sienta que con su voto puede decidir directamente qué inversiones se hacen en su calle o en su barrio.

Los vecinos son los que mejor saben qué necesita en su barrio

Efectivamente, son los mejores conocedores de las necesidades de su zona.

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