La Generalitat Valenciana ha aprobado unos presupuestos para 2023 centrados en la recuperación de las consecuencias económicas y sociales de la pandemia, la lucha contra las de la invasión de Rusia a Ucrania y la falta de financiación autonómica.
Unas cuentas de récord al alcanzar la cifra de 22.116 millones de euros, la más alta de la historia en gasto real (presupuesto no financiero), y que suponen un 6,8% más que en 2022 en términos relativos y 1.400 millones de euros más en términos absolutos.
Dentro de este presupuesto, el Consell ha determinado unas líneas estratégicas y prioritarias para los últimos meses de legislatura, unas políticas que se centran en la puesta en marcha de acciones contra la emergencia climática; la lucha contra la inflación y protección del empleo; el refuerzo de los servicios públicos y del derecho a la vivienda, y el fortalecimiento de las instituciones y la democracia.
En este sentido, el transporte público volverá a ser protagonista, con una dotación total de 270 millones de euros que se destinará al fomento de su uso con la mejora del servicio de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) y la Autoridad de Transporte Metropolitano de València (ATMV), las empresas encargadas de la gestión de Metrovalencia, MetroBus, Tram d’Alacant y Tram de Castelló.
Asimismo, y dentro de la lucha contra la inflación y la protección del empleo, entre las diferentes medidas previstas, los presupuestos autonómicos recogen la ampliación del 30% del descuento en el transporte público, que extenderá su vigencia a todo el año 2023, una rebaja que se une a la de hasta el 50% establecida por el Gobierno valenciano con la implantación de los títulos SUMA para el transporte público de competencia autonómica, incluidas las concesiones de autobuses, durante el próximo año. Esta ampliación, ha destacado Puig, convivirá durante 2023 con la gratuidad de los viajes de Cercanías y Media Distancia anunciada por el Ejecutivo de Pedro Sánchez.