81 vidas y toneladas de barro, las consecuencias de la ‘Riuà’ de València

Els últims episodis provocats per la DANA s’han comparat amb algunes de les pitjors riuades de la història

Guardar

 Jardín del Túria València
Jardín del Túria València

Se cumplen 62 años de la Gran Riada de València o, como se conoce popularmente ‘la riuà’. Hoy, 14 de octubre, se rememora una de las peores tragedias que azotó a la ciudad de València, y que se saldó con un total de 81 muertes. Fueron innumerables, además, los daños materiales que se produjeron. Y es que después de las lluvias, comenzó la ‘batalla del barro’ que se centró en unos 11,2 kilómetros cuadrados de la zona urbana, donde se llegaron a acumular alrededor de 1.131.000 toneladas de barro.

Las fuertes lluvias comenzaron el 11 de octubre de 1957. Sin embargo, con el paso de los días, las precipitaciones se fueron intensificando. Finalmente, fue el 14 de octubre de 1957 cuando el río Turia, que atravesaba la ciudad, llegó a su límite de capacidad, y se produjo el desbordamiento que inundó las calles de la ciudad. Solo algunos de los barrios más elevados se libraron del agua, pero este terrible desastre afectó no solo al ‘cap i casal’, sino también a numerosos vecinos y vecinas de otros municipios valencianos.

A raíz de este trágico día, y como medida preventiva, se construyó el Plan Sur, que consistía en la desviación del río Turia por el sur y en la colocación de las vías en paralelo al nuevo cauce. Asimismo, también se llevó a cabo la construcción del pantano de Loriguilla. Pero, ¿sería posible una nueva riada? Hay voces que apuntan a que el nuevo cauce del Turia tendría una capacidad limitada para soportar el caudal de agua que se produjo en 1957.

Los últimos episodios vividos en la Comunidad Valenciana a causa de la DANA también han hecho revivir episodios de inundaciones, que se han quedado marcados a lo largo de los años. En este sentido, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) catalogaba la riada que se produjo, este mes de septiembre, con el desbordamiento del río Segura, como “la más catastrófica en los últimos 70 años”. De hecho, Aemet la ha comparado con la riada de 1879 en la que entre Murcia, Orihuela y otras localidades de la Vega Baja se contabilizaron más de 1.000 muertos.

Lo cierto es que los efectos del cambio climático ya se están empezando a notar con episodios drásticos como los vividos el pasado mes de septiembre. Así, como apuntan diferentes asociaciones, las lluvias torrenciales o las altas temperaturas serán factores con los que se tendrá que lidiar si no se pone ya el freno.

Destacados