No habrá dinero para algunos vídeos

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Mucho se ha debatido últimamente sobre los límites en los contenidos en internet. Hasta dónde es posible llegar para obtener visitas a una página web o un canal de Youtube.

Parece que esta línea la estableció la cuenta DaddyOFive. Un padre y una madre de Baltimore publicaban a Youtube las bromas pesadas que hacían a sus hijos y finalmente los fue retirada la custodia de dos de ellos.

En el caso español nos encontramos dos vídeos famosos que también generaron fuertes polémicas: el caso del cara-anchoa y el vídeo del youtuber que dio galletas con pasta de dientes a uno sin techo.

Es por este motivo que la plataforma de vídeos ha decidido tomar cartas en el asunto. De este modo, todos aquellos vídeos que discriminan o humillan a personas o grupos de personas por su raza, etnia, religión, orientación sexual o nacionalidad, por ejemplo, no recibirán ingresos por publicidad.

Aunque pudiera parecer que Youtube está velando por los contenidos en la red (a pesar de que actúo meramente como censor), bien es verdad que la motivación de la plataforma para acabar con los vídeos que considera indebidos, tiene un trasfondo comercial evidente. Los anunciantes no quieren que sus vídeos se relacionan con ciertos contenidos. Muchos de ellos han perdido la confianza con el portal de vídeos y el que quiere conseguir esta, es recuperar la confianza con los anunciantes.

Esto nos conduce a una cosa que podríamos considerar un poco problemática. Por fin se demuestra que la motivación de toda la red, la última motivación, siempre es económica. Además, pone en riesgo la libertad de expresión y entronca con otro debate que conocemos bien en España, el de los límites del humor.

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