El equipo de salvamento y socorrismo de Alboraia ha rescatado este martes a cinco bañistas en la playa de Port Saplaya que se encontraban en la zona del espigón sur. Tres de ellos han sufrido policontusiones y uno presentaba síntomas de haber tragado agua.
Los hechos han ocurrido al mediodía, cuando un grupo formado por un total de 7 personas se estaba bañando en este espigón sur, en un momento en el que estaba izada la bandera amarilla, que recomendaba precaución, según ha informado el ayuntamiento en un comunicado.
Al ver los socorristas que este grupo se estaba bañando cerca del espigón, se lanzaron al rescate. Dos bañistas salieron por su propio pie ayudados por un pescador de la zona, pero los otros cinco (tres menores y dos adultos) han tenido que ser rescatados.
El mal estado del mar y la proximidad del espigón hicieron inviable la utilización de la embarcación de salvamento, lo que hizo más arriesgada la operación realizada por los socorristas, ya que sólo podían acceder a los bañistas a nado.
Participaron tres socorristas en el agua y en las rocas del espigón, preparados para la emergencia; dos técnicos en emergencias sanitarias, la ambulancia, una enfermera (DUE) y el coordinador de playas, así como otro socorrista en la posta sanitaria.
Los cinco bañistas rescatados llegaron por su propio pie a la posta sanitaria, donde se les ha atendido. No ha sido necesaria la derivación hospitalaria.
Asimismo, los socorristas han tenido que ser atendidos en la posta debido a las heridas leves causadas por la complicación del servicio cerca del espigón.
Desde el equipo de salvamento y socorrismo han explicado que la mañana se fue complicando por momentos debido al estado del mar y por ello se cambió a bandera roja. Además, han lamentado que en muchas ocasiones los bañistas "hacen caso omiso a las indicaciones de precaución de los socorristas".
Según han indicado, sobre las 16.15 horas y ya con bandera roja han tenido que advertir a una familia de cuatro que saliera del agua, ante lo que ha recordado que "la gente no es consciente del peligro que supone bañarse cuando ondea una bandera amarilla o roja".