Agentes de la Guardia Civil han explotado un artefacto perteneciente a la Guerra Civil que ha sido localizado en el término municipal de Buñol. Este proyectil estaba aún activo después de 70 años y se trasladó a una cantera propiedad de la Guardia Civil para llevar a cabo una explosión controlada y neutralizar el dispositivo.
Los hechos comenzaron en la mañana del 16 de mayo, cuando una persona residente en Buñol avisó que se había encontrado con un artefacto explosivo en las proximidades del cauce del río. Concretamente, dentro del espacio natural de la "Zona del Turche", en Buñol.
Tal y como explican los agentes, la llegada de este artefacto explosivo a esta zona se debe a que fue arrastrado por la corriente del río tras el último fuerte episodio de lluvias que arreció en toda la Comunitat Valenciana. Esto provocó que el proyectil quedara al descubierto.
Una vez la Guardia Civil tuvo conocimiento del avistamiento, en menos de una hora llegaron agentes del Equipo de Desactivación de Explosivos (EDEX) de la Comandancia de la Guardia Civil de Valencia y se pusieron al mando de la investigación e identificaron que el artefacto correspondía a un proyectil de artillería de 90 milímetros de calibre. Tras un tiempo examinándolo, concluyeron que con mucha probabilidad se trataba de un antiguo polvorín del Ejército de Tierra que explosionó en la década de los años 50 y, aunque esta en concreto no explosionó, probablemente también cayeran más explosivos en las proximidades de la localidad de Buñol.
Con las correspondientes medidas de seguridad, se trasladó el artefacto desde el cauce del río hasta la cantera de la Serratilla, un espacio en el que la Guardia Civil realiza ejercicios de tiro y adiestramientos de otras unidades del Cuerpo.
Así, el proyectil quedó totalmente inutilizado tras realizarse una explosión controlada que acabó con la pólvora que había en el interior del objeto. Cabe recordar que este tipo de sucesos siguen sucediendo cada año. Concretamente El Equipo de Desactivación de Explosivos de la Comandancia de la Guardia Civil de Valencia recibe entre 35 y 45 avisos al año en cuanto a hallazgos de artefactos explosivos.
Debido a que la probabilidad de encontrar artefactos explosivos de este calibre todavía existen, la Guardia Civil recomienda una serie de consejos en caso de que alguna persona se encuentre con alguno: no manipular el artefacto, señalizar el lugar, geolocalizarlo (en caso de poder) y llamar al 062 .