Xàbia necesita ponerle respiro a las continuas aglomeraciones de las miles de personas que se congregran verano tras verano en su litoral. Sus calas y cuevas marinas se han convertido en lugares imprescindibles para unos turistas (nacionales e internacionales) que no fallan a la cita. Eso sí, cada vez queda menos espacio, por lo que el ayuntamiento del municipio alicantino ha diseñado una propuesta.
En esta línea, el consistorio ha publicado un comunicado en el que se pide una subvención europea de 5,6 millones de euros dirigidos a la gestión sostenible de proyectos del litoral. Así, se trata de una ayuda que el propio ayuntamiento ha solicitado al ministerio de Industria, Comercio y Turismo dentro del programa de Planes de Sostenibilidad Turística en Destino (subcategoría destino de sol y playa mixto residencial) financiado con los fondos europeos Next Generation EU del Plan de Recuperación.
Hay que recordar que ya en su día el ayuntamiento estableció el sistema de limitación de aforos en sus calas para evitar estas saturaciones. Ahora quieren ir más allá y establecer un sistema de reservas mediante una aplicación. Una estructura operativa que ya funciona en el Penyal d'Ifac de Calp, la Cova Tallada y que se pretende activar en la cala del Moraig del Poble Nou de Benitatxell.
Con dicha ayuda europea, Xàbia pretende que esta aplicación se asiente en sus calas o cuevas como el Llop Marí o Els Òrguens. Además, también se dedicará parte del presupuesto a información de seguridad y de utilidad. Una Xàbia que quiere financiar también el control de tráfico y saturación que se despliega cada verano en calas como la Barraca, Portitxol o Granadella.
ACCIONES SOBRE LAS QUE GIRA EL PROYECTO
El proyecto, que gira en torno a la gestión sostenible del litoral local, desarrolla algunas acciones vitales. Una de las más llamativas es, sin duda, la gestión del sistema de reservas de los aforos de sus playas que comentábamos anteriormente. Los servicios auxiliares de seguridad, con personal informativo y de vigilancia (solicitándose una ayuda equivalente a una concesión trianual con un coste de 376.000 euros).
En dicho marco, otro de los aspectos es un sistema de reserva para las boyas de fondeo en el que se puede consultar la disponibilidad de playas en tiempo real y varios idiomas, gestionar las reservas e informarse a la vez sobre los espacios litorales protegidos (su presupuesto es de 200.000 euros).
Sin embargo, una de las acciones más importantes que desarrrollan es la de la intervención en la Avenida Mediterráneo para la protección de los usuarios vulnerables, presupuestada en 2’5 millones de euros. Consiste en un conjunto de obras dirigidas a adaptar la avenida como senda litoral. De esta forma, se potenciará como eje de transición entre el medio marino y el urbano.
Se debe destacar también la instalación de paneles informativos acerca de la biodiversidad presente y, al mismo tiempo, se seleccionarán materiales ecológicos como pavimento o luces, además de ornamentación verde que mejore la contaminación del aire.
Por último, hay más proyectos incluidos como es el caso de la adecuación de los dos edificios del faro del Cap de Sant Antoni como centro de interpretación de la reserva marina de los fondos marinos. Se trata de un área para la concienciación, divulgación y educación ambiental (1’4 millones) y un plan de renovación del alumbrado en instalaciones municipales por equipamientos más eficientes energéticamente (valorado en 1’6 millones).