Después de ocho meses de trabajos intensivos, Metrovalencia ha recuperado la “normalidad” en uno de sus tramos más afectados por la DANA del 29 de octubre. Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) ha anunciado que, en su primer mes desde la reapertura del servicio entre València Sud y Castelló, se han registrado ya un total de 400.000 desplazamientos. Además, el conseller de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio, Vicente Martínez Mus, también ha hecho oficial una de las noticias más esperadas: el regreso del servicio nocturno a partir del 1 de agosto, lo que consolida la vuelta a la operatividad plena del sistema. En los próximos días, tal y como afirman fuentes de FGV, conoceremos todos los detalles, tanto del tradicional servicio de noches como del horario de verano, el cual suele prolongarse durante el mes de agosto.
Volviendo al asunto principal, las obras de emergencia, que han supuesto una inversión millonaria, han incluido la reconstrucción de las estaciones de Paiporta y Picanya y la habilitación de un mirador memorial junto al barranco del Poyo, como homenaje a las víctimas y consecuencias de las riadas. Esta intervención ha permitido reabrir completamente la circulación de las líneas 1, 2 y 7, fundamentales para la movilidad en el sur metropolitano de València. A continuación, te contamos cómo ha sido la vuelta a la “normalidad” de Metrovalencia.
Así ha vuelto la normalidad a Metrovalencia tras las riadas
La DANA de octubre dejó inutilizable parte del tramo sur de Metrovalencia, obligando al cierre de 20 estaciones y apeaderos que conectan València con las comarcas de l’Horta Sud y la Ribera Alta. Las líneas más afectadas fueron la 1, 2 y 7, que cruzan municipios como Paiporta, Picanya, Torrent, Silla, Alginet o Castelló, y que constituyen un eje vertebrador para el transporte diario de miles de personas trabajadoras y estudiantes.
Tras meses de trabajos urgentes, la circulación se restableció el 27 de junio, lo que ha permitido recuperar la conexión ferroviaria en una de las zonas más densamente pobladas del área metropolitana. En solo cuatro semanas, el servicio ha contabilizado más de 400.000 usuarios, lo que pone de manifiesto la importancia de esta infraestructura para la vida diaria de la ciudadanía.
Además, la reapertura no solo ha supuesto la recuperación de trenes y andenes, sino también la rehabilitación integral de las estaciones más dañadas. En Paiporta, por ejemplo, la estación ha sido completamente reconstruida y cuenta ahora con un entorno mejorado y un mirador simbólico, mientras que en Picanya se han reforzado los accesos y la accesibilidad. La actuación ha beneficiado a decenas de municipios que, durante meses, vieron interrumpido su principal medio de transporte público.
Un mirador para no olvidar el 29 de octubre
Además de restablecer la circulación ferroviaria, las obras de emergencia han incluido una intervención simbólica y urbana en Paiporta: un mirador en memoria de la DANA del 29 de octubre. Este espacio, situado junto al acceso al viaducto ferroviario y con vistas al barranco del Poyo, se ha diseñado como un homenaje a la resiliencia de los municipios afectados por las riadas.

El mirador está cargado de elementos simbólicos. El banco de hormigón que lo preside está colocado a 2,4 metros del borde del antiguo paso peatonal, en referencia al año 2024, cuando se produjo el temporal. La longitud del banco, de 10,29 metros, alude directamente al 29 de octubre, la fecha exacta de la catástrofe. Además, los respaldos del banco alcanzan alturas de 1,50 y 2,40 metros, cifras que representan el nivel que alcanzaron las aguas en varios puntos de l’Horta Sud.
También se ha actuado en el entorno del puente y del paso inferior que conecta con el camino del Cementerio, accesible desde la propia estación. Esta intervención convierte el espacio en un lugar de recuerdo colectivo, pero también de uso público, donde la infraestructura ferroviaria se entrelaza con la memoria del territorio.
Paiporta y Picanya renuevan sus estaciones tras quedar destrozadas
Las estaciones de Metrovalencia en Paiporta y Picanya fueron dos de los puntos más golpeados por la DANA. El agua obligó a demoler por completo los edificios existentes, ya que la infraestructura resultó irreparable. En respuesta, Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana ha invertido más de cinco millones de euros en su reconstrucción, apostando por instalaciones más modernas, cómodas y accesibles para las personas usuarias.
En Paiporta, la actuación ha incluido tanto la reconstrucción de los andenes como la mejora del entorno urbano. En Picanya, además de reparar los daños, se ha mejorado la accesibilidad para garantizar que todas las personas puedan utilizar el metro con normalidad. Estas intervenciones no solo han permitido recuperar el servicio, sino también actualizar las instalaciones con criterios de seguridad y eficiencia.

También se ha actuado sobre el puente del barranco del Poyo, con un presupuesto de 6,4 millones de euros. En este proyecto se ha integrado una nueva pasarela peatonal que vuelve a unir Paiporta y Picanya, tras ser destruida por la riada. El contrato incluye, además, la inspección y revisión de 13 estructuras a lo largo del tramo Picanya-Castelló, para prevenir futuras incidencias y garantizar la fiabilidad del servicio a largo plazo.