El Consejo de Ministros ha aprobado el anteproyecto de ley para la reducción de la jornada laboral de 40 a 37,5 horas semanales, sin pérdida de salario; así como la implantación de un nuevo registro de horario digital, que conectará directamente con la Inspección de Trabajo, y que permitirá un mayor control de las horas extras trabajadas.
En definitiva, cambios importantes tanto para los trabajadores, como a nivel organizativo de las empresas que obligará a “nuevas negociaciones laborales”. De todo esto hablamos hoy, en València Extra, con el experto Óscar Bermejo, CTO de Protime y socio fundador de Softmachine.
¿Qué impacto tendrá la reducción de la jornada laboral en las empresas?
Bueno, yo creo que va a tener un impacto sobre todo a nivel organizativo porque el hecho de reducir la jornada implicará renegociar, redefinir los horarios laborales, establecer nuevas pautas y nuevos criterios para que se cumpla esa nueva norma, que es de 37 horas y media a la semana en lugar de 40. Por tanto, eso significará ajustar horarios, ajustar flexibilidades, ajustar un poco las medidas en ese sentido.
Y, ¿de qué manera se podrá aplicar esta reducción de la jornada laboral? ¿Se podrá acumular en un mismo día?
Bueno, antes de nada decir que el proyecto de ley todavía no está publicado, no está aprobado, con lo cual estamos muy a la espera de entender y conocer exactamente cuál es el alcance de la norma y cuáles son las condiciones de aplicación de la norma. Si es cierto que entendemos que no va a ser de aplicación rígida, es decir, igual que ahora el Estatuto de los Trabajadores marca que la jornada semanal es de 40 horas, las personas no trabajamos ocho horas regularmente todos los días, entonces entendemos que la medida estará condicionada por la flexibilidad. En este sentido, incluso se contempla, o se habla en algún foro, de la posibilidad de trabajar cuatro días a la semana, dejando un día libre.
En definitiva, creo que la aplicación de la reducción de jornadas será flexible en el buen sentido, y no tendremos que trabajar media hora menos al día, sino que podremos acomodarlo; y el convenio laboral tendrá que acomodarse también a esta nueva norma, pero siempre con criterios de flexibilidad y de distribución irregular de la jornada.
La reforma laboral dejará al descubierto la realidad de las horas extra
¿Las empresas tendrán que llegar a un acuerdo con los trabajadores?
Partimos de la base de que esto es un decreto ley, que es la norma de más prioridad por así decir, con lo cual en el momento que este decreto ley se apruebe, los convenios laborales que existan en las empresas y los convenios colectivos tendrán que adecuarse a la nueva norma, eso producirá muy probablemente una negociación de las condiciones de los horarios laborables en las empresas. Y entonces, en el momento que hay una negociación, las dos partes tendrán que acordar la forma en la que se aplica la norma, pero la norma es de aplicación obligatoria para todas las empresas y en la medida que se aplique de un modo u otro, entendemos que será un fruto de la negociación con los sindicatos, con los representantes, los trabajadores y con las empresas.
Por otra parte, se está incorporando un nuevo registro de horas digital, ¿cómo se puede garantizar que sea eficaz?
Lo que proponemos desde ProTime es un registro digital, un registro fiable, con un programa que dote de las medidas de autenticidad del fichaje. Una de las cosas que la nueva reforma laboral incide es que el dato sea inequívoco, es decir, que la identificación de la persona sea inequívoca. Aquí entrará en funcionamiento todo lo que son reconocimientos de datos biométricos, es decir, eso de la huella dactilar para certificar que la persona que está registrando es exactamente la persona que ficha.
Y otra cuestión importante que introduce la reforma es que el trabajador sea quien registre la jornada, es decir, la empresa no tendrá o no deberá tener la capacidad ni para modificar, ni para alterar o borrar o añadir información de ese tipo.
Se contemplan sanciones de entre 1.000 y 10.000 euros para los trabajadores que incumplan el registro de horario digital
¿Y qué posibles sanciones económicas pueden conllevar si no se cumple este registro de horas?
En este sentido, hay dos cambios. Uno es en la cuantía de las sanciones: como no es un proyecto aprobado, no podemos hablar de datos 100 % fiables, pero lo que se está conociendo es que se aumenta la cantidad económica de las sanciones, que van a ir en un grado entre 1.000 y 10.000 euros. Pero el principal cambio no es solo ese, sino que hasta ahora la sanción era por empresa, es decir, se aplica una sanción entre 750 y 7.500 euros por empresa, y a partir de la reforma, la sanción es por trabajador. Con lo cual, el efecto multiplicador de la mejoría de trabajadores va a ser muy importante; porque una multa de 750 euros, que podría ser hasta asumible por la mayoría de las empresas, no lo será para el trabajador.
Yo creo que uno de los objetivos que se persigue es tener un reflejo mucho más veraz de la realidad en los horarios laborales. Es decir, en España, hay muchas horas extras o que no se registran o que no se pagan. A partir de la reforma, la Inspección de Trabajo tendrá acceso directo a la información del registro de jornada y a tiempo real. De esta manera, podrá auditar, controlar y supervisar el cumplimiento de las horas y dejará al descubierto la realidad de los horarios laborales y, sobre todo, de las horas extra.