"Si los valencianos me dan la confianza dentro de unas semanas, propongo llevar a cabo una triple revolución fiscal, económica y social". Así ha comenzado una de sus intervenciones la candidata del Partido Popular de la Comunidad Valenciana (PPCV), Isabel Bonig, en el primer debate electoral de las Elecciones Autonómicas del 28 de abril. Bonig ha detallado en que consistirán estas tres 'revoluciones'. Sin embargo, como le ha señalado la candidata de Compromís Mónica Oltra, el candidato del Partit Socialista del País Valencià Ximo Puig y diversos diarios, sus cuentas no cuadran.
Con las propuestas de Bonig la Comunitat dejaría de ingresas, 'a la baja', 820 millones de euros. Algo que no se recuperaría, por ejemplo, con la eliminación de lo que llama "chiringuitos" y que, asegura sin detallar, cuestan 457 millones de euros; todavía quedan, mínimo, 363 millones.
Según ha vuelto a detallar Bonig -ya lo hizo semanas atrás-, propone una "bajada masiva de impuestos como nunca se ha hecho en la Comunidad Valenciana", con "la renta por debajo del 40%" y, asegura, una disminución del 7% del pago de la declaración de la renta para aquellos que cobren 35.000 euros o menos. "Eliminaremos el impuesto de sucesiones, de patrimonio, de donaciones y de los que adquieran su primera vivienda", ha añadido.
Respecto a la "revolución económica" ha anunciado que va dirigida a las pequeñas y medianas empresas (Pymes), con la extensión de la tarifa plana para autónomos a dos años, y exención de todo pago para menores de 30. También ha anunciado una "agilización de las licencias ambientales, que tienen paralizada una inversión de 700 millones de euros", sin aportar datos de ningún tipo.
Oltra se ha mostrado indignada con las propuestas de Compromís y Ciudadanos, que también promete bajadas de impuestos: "Cuando ustedes hablan de revoluciones fiscales, qué credibilidad tenéis, si lo primero que hacéis al llegar al gobierno, como en Andalucía, es quitarle los impuestos a las grandes fortunas, a los que más tienen, y decir a la gente sencilla que tiene que pagar más por la educación infantil".
"Gobernar para 22.000 personas"
Puig también ha respondido con dureza a las propuestas de Bonig: "Es una broma". Para el candidato socialista, cuando Bonig habla de la subida de impuestos a los valencianos y su prometida revolución, hace 'Fake News'. Según ha asegurado, cuando el Botànic llegó al gobierno "bajó los impuestos a millón y medio de valencianos" porque, asegura, "las rentas altas pagaban menos que en el resto de España y las bajas más". "Lo que usted quiere es amnistiar, como hizo Montoro. ¿No son constitucionalistas? Pues apoye la constitución: progresividad fiscal", ha aseverado.La candidata de Compromís ha aprovechado una de las propuestas de Bonig para rebatirla. Según asegura la Vicepresidenta, el impuesto de patrimonio que pretende eliminar "sólo lo pagan 22.000 valencianos, un 0,5%, los más ricos". "Quiere gobernar para 22.000 personas", ha añadido Oltra. En la Comunitat, actualmente, sólo pagan el Impuesto de Patrimonio aquellas personas con más de 600.000€ y una casa de, como mínimo, un valor de 300.000 euros, lo que da la cifra detallada por Oltra.
Según los cálculos 'a la baja', la "revolución fiscal" que propone Bonig supondrían 820 millones de euros menos para las arcas públicas y, por tanto, una mayor dependencia de la Comunitat respecto a Madrid.
Bonig llama "revolución social" a su promesa de "acabar con las listas de espera" derivando pacientes a la sanidad privada o con la recuperación de la "libertad" de los padres para escoger centro escolar y lengua vehicular. Una limitación falsa; no existe en la legislación actual.