El diputado del Grupo Popular en Les Corts José Antonio Rovira, ha advertido hoy que "la letra pequeña del requisito lingüístico la va a elaborar Compromís con el permiso de Puig, es para echarse a temblar" porque "tienen un camino muy claro para catalanizar nuestra tierra, una hoja de ruta para construir una nación valenciana a imagen de lo que se pretende en Cataluña".
Así, ha recordado que la propia vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra ha defendido como "necesario" que los médicos tengan una titulación de valenciano para atender a sus pacientes, declaraciones "aplaudidas por entidades catalanistas como Acció Cultural del País Valencià que ya habla del requisito valenciano como un éxito".
"Por eso no es de extrañar que, mientras los valencianos bajaban la persiana o nutrían las colas del paro y del hambre, el Consell regaba a las entidades catalanistas con dinero público de los valencianos durante el año de pandemia", ha denunciado. Así, las entidades vinculadas a Eliseu Climent, Escola Valenciana, la Societat Coral El Micalet entre otras, se han llevado de los valencinos 3,1 millones de euros "gracias a Puig".
Rovira ha explicado que a partir del próximo año todos los funcionarios de cualquier nivel de la Generalitat y de todos los ayuntamientos tendrán que tener una titulación de valenciano. "La letra pequeña de este requisito lingüístico se desarrollará en los próximos meses y será Compromís quien controlará este proceso, con el beneplácito de Ximo Puig, por lo que es para echarse a temblar" ha señalado.
Así, ha señalado que una de las primeras cosas que hará el PPCV es derogar el requisito lingüístico, "lo llevaremos en nuestros programa electoral para así permitir la continuidad de los miles de interinos a los que el Botànic quiere echar a la calle". "El Botànic no ha hecho nada en estos seis años y ahora los quiere mandar al paro".
En este contexto, ha recordado que esta Comunitat "siempre ha sido bilingüe, pero el Botànic la quiere convertir en monolingüe" y ha afirmado que Compromís "tiene un camino muy claro, es quien tiene la hoja de ruta y el camino final son los Països Catalans".
Así, ha denunciado que la nueva ley de función pública "no va a dar ninguna solución al elevado número de interinos de la administración valenciana".