El president de la Generalitat, Ximo Puig se ha reunido esta mañana con representantes del sector de la hostelería en la Comunitat Valenciana para explicarles las ayudas incluidas en el Plan Resistir, a las que se pueden acoger para paliar los efectos de la restricción de actividad establecida con el fin de hacer frente a la pandemia de COVID-19. Cabe recordar que el sector de la hostelería valenciana es la que más ayudas directas recibe del país.
En el transcurso de la reunión, el president ha trasladado la apuesta decidida del Consell por minimizar los daños y reactivar los sectores económicos más afectados, como es el caso de la hostelería, mediante el plan de choque aprobado la pasada semana y que está dotado con 380 millones de euros.
Este plan de choque Resistir, se articula en cuatro bloques: ayudas directas a empresas, autónomos y trabajadores afectados por ERTE; ayudas específicas para sectores con un perjuicio sostenido durante toda la pandemia; nuevos instrumentos financieros del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF); y las ayudas Paréntesis, en colaboración con diputaciones y ayuntamientos.
En la reunión han participado el secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, y los presidentes de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV), Salvador Navarro; la Confederación Empresarial de Hostelería y Turismo de la Comunitat Valenciana (CONHOSTUR), Manuel Espinar; la Federación de Ocio, Turismo y Juego de la Comunitat Valenciana (FOTUR), Victor Pérez; la Unión Hotelera de la provincia de València (UHPV), Luis Miguel Martí; y la presidenta de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería (APEHA), María del Mar Valera.
Puig presenta el Plan Resiste en el Palau de la Generalitat
PLAN RESISTIR
El Plan Resistir se centra en ofrecer ayudas complementarias al sector de la hostelería y restauración, actividades turísticas, artísticas, parques de atracciones y ludotecas, así como a los sectores relacionados con la fiesta. Concretamente estas ayudas van íntegramente al sector de la hosteleria, puesto que representan el 30% de pérdidas del valor añadido y el 59% de la destrucción del empleo, sin contar que casi la mitad de los trabajadores de la hostelería siguen en ERTE. "Son sectores decisivos y necesario para nuestra prosperidad", añadió Puig en la presentación de este plan de ayudas.En un principio, este plan de choque estaba dotado con 340 millones para los sectores más afectados tanto por la pandemia de la COVID-19 como por los efectos de las restricciones de la Generalitat en cuanto al cierre total del sector de la restauración, pero con el anuncio de las Ayudas Paréntesis y tras el incremento en la aportación de la Generalitat, el Plan Resistir asciende a un global de 380 millones para ayudar a empresas, autónomos y trabajadores a hacer frente a las restricciones que hoy entran en vigor, especialmente para los sectores de la hostelería, el turismo, el ocio y las actividades artísticas y culturales.
De este modo, las seis medidas principales que componen el Plan Resiste son las siguientes:
1. Una línea de ayudas directas, dotada con 80 millones de euros, para la cobertura íntegra, durante dos meses aproximadamente, de las cuotas de la Seguridad Social dirigida a autónomos y empresas. Estas ayudas repercutirán en 170.000 trabajadores, de los que 43.000 son autónomos, y en 21.000 empresas.
2. Una línea de ayudas específicas de 8 millones de euros para los 26.000 autónomos más afectados, que se complementará con las prestaciones que reciben de la Seguridad Social.
3. 17 millones de euros para los más de 48.000 trabajadores que siguen en ERTE.
4. Una ayuda específica para el sector del ocio y el entretenimiento, con especial atención al ocio nocturno, y que estará dotada con 8 millones de euros.
5. Dos líneas del Institut Valencià de Finances dotadas con 100 millones de euros: se trata, por un lado, de una línea de préstamos bonificados de hasta 750.000 euros para las empresas vinculadas con el ocio, alojamiento y restauración, y actividades conexas, a través de la cual el IVF pretende movilizar 50 millones de euros. Estos préstamos incluyen una parte no reembolsable que podrá alcanzar según los tramos del crédito hasta el 30%; y, por otro lado, se crea una línea para préstamos participativos, de hasta 800.000 euros, "para empresas con una situación financiera límite y que antes de la pandemia sí eran viables". Con esta línea, el IVF pretende movilizar otros 50 millones de euros.
6. El Fondo de Cooperación Covid, cuyo mínimo aumenta a 127 millones de euros al incorporar las ayudas que se destinarán al sector de la artesanía.