Mireia Mollà denuncia la falsificación de su firma en una carta con un bulo dirigida a un vecino de Torrent

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La consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollà, en Bruselas
La consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollà, en Bruselas

La consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollà, ha denunciado este miércoles en redes sociales la falsificación de su firma y del logotipo de la Generalitat en una comunicación enviada a un vecino de Torrent (Valencia), que ha tachado de bulo, sobre un supuesto programa de la Conselleria para la plantación de árboles en parcelas privadas bajo amenaza de multas.

Mollà advierte que "cualquier vecino y/o ayuntamiento al que le llegue esta comunicación, que sepan que es un bulo" y adjunta dos imágenes de la carta, que incluye el logotipo de la Generalitat y el encabezado de la Conselleria, así como el número de referencia de la parcela a la que hace referencia y la firma de la consellera.

En concreto, en ella se insta a un vecino del Vedat de Torrent a plantar tres nuevos árboles en su parcela, a escoger entre una serie de especies, con una altura mínima de dos metros, y se promete el "reintegro" de 300 euros por cada árbol "a deducir de la declaración de la renta", en lo que llama "estrategia de reforestación de nuestras áreas urbanas y lucha contra la impermeabilización del suelo y el cambio climático".

La carta argumenta que "el calentamiento del sistema climático es inequívoco" y su "impacto potencial es dramático", por lo que señala que, "con la ayuda de herramientas como el programa Copérnicus y el resto de planes y programas de la Comisión Europea", la Conselleria va a emprender una "reforestación sin precedentes".

Es en este contexto que esta carta falsa incluso establece un plazo hasta el 1 de abril para que su destinatario, vecino del Vedat de Torrent, plante "como mínimo" tres árboles de tres especies de una lista que se indica, con una altura de dos metros mínimo y un espacio de seis metros entre sí; prohíbe la tala de árboles y asegura que a partir de agosto se llevarán a cabo inspecciones para comprobar que se han plantado estos árboles. En caso de no ser así, la carta amenaza con que se interpondrán multas y se incoará un expediente sancionador.

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