La consellera de Justicia, Interior y Administración Pública, Gabriela Bravo, ha defendido que es "tiempo de avanzar en un cambio del modelo policial" que, además de combatir la delincuencia, busque identificar sus causas para prevenirla. Así se ha expresado durante su intervención en la apertura del Foro de Convivencia y Seguridad organizado por el Ayuntamiento de València, que se abierto este lunes en la capital.
La consellera ha explicado que tradicionalmente "se ha entendido la labor policial como una actividad reactiva ante la comisión de un delito". Sin embargo, "sin dejar de lado esa función, como es lógico, debemos avanzar desde un modelo policial únicamente reactivo a otro proactivo con un doble objetivo: por un lado, actuar para evitar la potencial comisión de infracciones y, por otro, aumentar la confianza en la policía, dado que la ciudadanía percibe a los policías como servidores públicos que atienden sus necesidades, en lugar de como agentes sancionadores".
Para la consellera "es especialmente importante este último aspecto porque, cuanta más confianza tenga la ciudadanía en su policía, ésta gozará de mayor legitimidad y, con ella, se conseguirá una mayor obediencia a la ley puesto que estas dos herramientas son más efectivas a la hora de hacer cumplir las normas que el miedo a la sanción".
Para ello, además de la inversión en medios materiales y humanos, "es fundamental profundizar en la formación de las plantillas para que sus miembros sean capaces de servir y proteger mejor a todos y todas".
En este sentido, la consellera ha destacado la labor del Instituto Valenciano de Seguridad Pública y Emergencias (Ivaspe) que, a lo largo de sus 25 años de historia, "ha formado a más de 70.000 policías, bomberos y personal de emergencias que han recibido las mejores herramientas para poder ofrecer un servicio de calidad en la siempre difícil labor de salvaguardar la seguridad y la integridad de la ciudadanía".
Para la consellera, en materia de seguridad "la tarea nunca está completa ya que trabajamos hoy para seguir trabajando mañana". Según ha explicado, "los problemas de convivencia y seguridad del siglo XXI no son los del siglo XX y fenómenos como la globalización, la revolución tecnológica, la inmigración masiva o las nuevas formas de delincuencia nos obligan a adoptar un nuevo paradigma de seguridad pública".
Un paradigma en el que las policías locales serán "esenciales como ya lo son ahora y lo han demostrado durante la pandemia" puesto que "en nuestro sistema de derechos y libertades, la ciudadanía tiene en la Policía Local el primer escudo pues es el cuerpo de Seguridad más próximo y el más cercano a los problemas del día a día", ha concluido Gabriela Bravo.