Casi cuatro décadas después del incendio en la sala calle Alcalá 20 de Madrid, en el que fallecieron 82 personas, se produjo el grave incendio de dos discotecas en Murcia, que se cobró 13 vidas. Zoom, el espacio de reportajes de investigación de À Punt que se emite los lunes en hora de máxima audiencia, analiza esta semana hasta qué punto son seguros los locales de ocio y, particularmente, las discotecas. ¿Cuáles son las medidas de seguridad que deben cumplir? ¿Quién es el responsable de controlar el cumplimiento de la normativa?
En la sala Alcalá 20, las llamas se extendieron rápidamente y el local se convirtió en una trampa sin salida para las personas que allí se encontraban. El fuego, el humo y las avalanchas provocaron una catástrofe sin precedentes en España. El espacio capitaneado por Bernar Giménez entrevistará a los supervivientes, para conocer su testimonio en primera persona. Durante el proceso judicial, se comprobó que el recinto no cumplía las medidas de seguridad. Aquel siniestro forzó a la administración a endurecer la normativa para los locales nocturnos.
Otros expertos entrevistados en el programa relatarán las similitudes entre el incendio de Madrid y el sucedido en Murcia. ¿Cómo es posible que un hecho de este tipo se repita cuarenta años después y tras el endurecimiento de la legislación? ¿Es necesario revisar la normativa?
¿Qué recorrido judicial tendrán que afrontar los afectados y sus familias por la tragedia de Murcia? Zoom también explicará qué pasó en la discoteca Flying de Zaragoza en 1990, donde murieron 43 personas. La investigación y juicio posterior se alargaron durante más de 20 años y ninguna de las víctimas recibió una compensación económica.
Después, el documental ‘Negar la pau, fossa de la terra’
A las 23:15 horas, después de Zoom, À Punt emitirá el documental sobre memoria histórica centrado en la fosa común 126 del cementerio de Paterna, la conocida popularmente como “la fosa de la tierra”, donde fueron enterrados 2.238 fusilados del franquismo tras la guerra civil. Negar la pau, fossa de la terra es un trabajo que se centra en el seguimiento de las historias de algunos de los protagonistas, con testimonios de sus familiares, el recorrido que hacen desde que se abren las fosas hasta que son identificados y son entregados los restos mortales a sus familias.
La fossa 126 de Paterna no es una fosa cualquiera. Es la fosa. Fue bautizada “de la tierra” por las familias. Por amplia, honda, por su terrorífico alcance (71 municipios) y porque muchos de represaliados eran labradores. También por la esperanza de una fértil cosecha, la de la memoria, la justicia y la reparación.
Contacto de Prensa y Comunicación en À Punt: Éncar Ferrando (622011974).