Las nuevas normativas "hacen imposible el espectáculo", aseguran desde Cuba-Literato Azorín. El Bando de Fallas 2019 trajo novedades. Novedades relativas a los horarios de las verbenas, para lanzar pirotécnica y a la seguridad de falleros y personas en general. En todos aquellos actos en los que se puedan concentrar más de 5.000 personas, el Bando indica la obligación de disponer, desde una hora antes del inicio del evento, de una ambulancia o unidad de evacuación debidamente equipada. Además, deben mantenerse despejadas las salidas de evacuación.
Tras el anuncio de este requerimiento, la falla Sueca-Literato Azorín anunció que, con el fin de promover una "buena armonía" con vecinos y hostelería, cancelaba su espectáculo de luces. Esta decisión, sin embargo, no afecta a la puesta de luces en sí ni a su participación en el concurso. Una semana después la comisión de Cuba-Literato Azorín anunció que tampoco ofrecerá el espectáculo de luces.
"Dispositivos consensuados"
Cuba-Literazo Azorín, tras la eliminación del espectáculo de luces en Russafa, ha decidido publicar un comunicado en el que detalla su decisión y señala al Bando de Fallas como el culpable de la cancelación. "La renuncia a realizar los espectáculos la hemos tomado, muy a nuestro pesar, a la vista de las normativas y disposiciones del Bando, que hacen imposible no sólo la realización de dichos espectáculos, sino las normales actividades del colectivo fallero", aseguran en el escrito. Desde la Directiva aseguran que "la seguridad del público" que les visita, sus vecinos y sus familias, es su "principal preocupación".Al anunciar el cese de los espectáculos, el Concejal de Fiestas y Presidente de la Junta Central Fallera, Pere Fuset, aseguró que el Ayuntamiento tenía preparados "todos los dispositivos de seguridad" para garantizar los espectáculos de luces. Aseguró, además, que "estos dispositivos han sido consensuados en varias reuniones donde también han participado otras comisiones del barrio y se pudo elegir entre varias opciones". El Concejal detalló una oferta a la falla para que las condiciones no fueran las mismas que un "espectáculo masivo", pero la decisión no se ha cambiado.
El dispositivo de seguridad previamente consensuado, en caso de haberse aplicado, habría afectado a las calles aledañas desde las que se ve el espectáculo. En ellas, además de las habituales terrazas de hostelería, se instalan 'food trucks' y puestos de comida que dificultarían el disponer de una zona de evacuación despejada. Estas medidas de seguridad se aplican en un contexto que suma, por una parte, un evento -las Fallas- que atrae a casi 2 millones de personas con una alerta antiterrorista nacional.