Más de 1.400 bares y restaurantes de la Comunitat Valenciana afectados por la DANA comienzan a reabrir gracias a la campaña “Tenemos una comida pendiente”, impulsada por CONHOSTUR, Turisme Comunitat Valenciana y Hostelería Valencia. La iniciativa busca acompañar a los hosteleros en su recuperación, reactivar la actividad turística y devolver la vida a los municipios más golpeados por las recientes inundaciones.
Apoyo ciudadano para reactivar la economía local
El objetivo principal de la campaña es visibilizar la situación del sector y motivar a la ciudadanía y a los visitantes a volver a los bares y restaurantes dañados. Durante diciembre, un mes lleno de comidas y cenas navideñas, cada mesa ocupada se convierte en un impulso económico y social que ayuda a la recuperación del sector.
“Cada almuerzo, cada café y cada comida compartida es una forma de reconstruir”, señala Manuel Espinar, presidente de CONHOSTUR.
Promoción y turismo gastronómico como motor económico
“Tenemos una comida pendiente” busca promocionar los establecimientos afectados e incentivar el consumo local mediante el turismo gastronómico, uno de los motores económicos más importantes de la Comunitat Valenciana. La campaña cuenta con materiales gráficos y audiovisuales que se difunden en Metrovalencia, EMT Madrid, EMT Valencia, medios de comunicación y redes sociales.
Testimonios que inspiran resiliencia
Hosteleros directamente afectados por la DANA, como Bar Fernando, Bar Alejandro y El Restaurante de Carina, junto con voluntarios que colaboraron durante las inundaciones, comparten sus experiencias. Sus relatos destacan la solidaridad, la resiliencia y la importancia del apoyo mutuo para superar los momentos más difíciles.
Más que un lema: una invitación a reconstruir
Además de esta acción promocional, se han puesto en marcha otras medidas de apoyo, como asesoramiento, ayudas extraordinarias y estrategias de promoción turística.
La campaña no es solo un eslogan, sino una invitación a volver, reencontrarse y contribuir a que cientos de familias puedan seguir adelante. Cada mesa ocupada representa un paso más hacia la recuperación económica, social y emocional de las localidades afectadas.