El Consell de la Generalitat Valenciana exigirá al Ministerio de Hacienda el ingreso "inmediato" de los 1.567 millones de euros de liquidación de 2016, unos recursos que el Gobierno ha retenido desde hace dos años y cuya titularidad corresponde a la Generalitat.
Es la respuesta del gobierno valenciano ante la decisión del ministerio de recortar la financiación de la Comunitat en términos de caja para 2018, debido a la falta de unos Presupuestos Generales del Estado; así como ante el incumplimiento de la promesa de un nuevo sistema de financiación autonómico que tendría que haber sido aprobado en 2017. De esta forma, se pretende garantizar el pago a los proveedores valencianos, además de asegurar la prestación de los servicios básicos.
Así lo ha anunciado la vicepresidenta y portavoz de la Generalitat, Mónica Oltra, en la rueda de prensa tras la reunión del pleno del Consell. Oltra ha asegurado que todo lo anterior, "junto a la situación de infrafinanciación de esta Comunitat", supone "un agravamiento de las tensiones de liquidez que la Comunitat Valenciana soporta". Además, ya anuncia que "el periodo medio de pago a proveedores se verá perjudicado" a causa de la falta de entregas a cuentas por parte del ministerio.
Está previsto que sea en julio la entrega de estos 1.567 millones de euros, pero, según la Generalitat, "resulta prioritario" que se adelante por la "urgente necesidad" y como "medida paliativa", por lo que no debe haber ningún impedimento para que el Gobierno siga reteniendo tal cantidad hasta el mes de julio.
Oltra ha señalado que estos procesos suelen iniciarse por la vía epistolar –por carta– entre ambas Administraciones y posteriormente suelen acabar con un contacto directo, por teléfono o de forma presencial.