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Tras la peatonalización de la plaza del Ayuntamiento, el centro de la ciudad empieza a ganar un importante espacio para el disfrute de la ciudadanía. Y es que el cierre definitivo del tráfico de una de las plazas más emblemáticas de la ciudad también repercute en la plaza de la Reina, que deja de ser la gran parada de autobuses que había sido hasta ahora. Si, además, se le añade el espacio peatonal con el que, desde hace unos años, cuenta el entorno de la Lonja y el Mercado Central, el resultado no es otro que la recuperación de más de 22.000 metros cuadrados de espacio público.
Desde el gobierno municipal se han propuesto crear una ciudad más sostenible, que priorice al peatón frente al vehículo privado. Una 'València, ciudad de plazas' que se ha ido proyectando en diferentes barrios de la ciudad y que, ahora también, ha llegado hasta el núcleo histórico de la ciudad con diferentes proyectos de peatonalización.
El primero que ha visto la luz ha sido la peatonalización permanente de la plaza del Ayuntamiento. En un primer momento, se ha llevado a cabo mediante una actuación blanda, a base de pilones y jardineras, que han delimitado el espacio peatonal del vial que permanece para el paso de la línea C1 de la EMT – la única que circulará por el interior de la plaza –, taxi, carga y descarga y acceso a parkings. Una actuación que ha permitido ganar 12.000 metros cuadrados de espacio público.
No obstante, todavía queda pendiente rematar este proyecto con las obras de asfaltado definitivo, que aportará un tono rojizo al suelo de la plaza, así como la instalación de nuevas zonas de ocio. Esta actuación se llevará a cabo en el mes de junio, y conformará la nueva imagen de la plaza del Ayuntamiento hasta que salga el proyecto elegido del concurso de ideas pendiente.
La plaza de la Reina también está a la espera de que se inicie su proyecto de remodelación, que recuperará más de 10.000 metros cuadrados para la ciudadanía. Sin duda, una de las actuaciones que más cambiarán la imagen actual de esta plaza es que desaparecerá, de la parte central, tanto la entrada del aparcamiento subterráneo, como las paradas de EMT y taxi. Sin duda, la plaza de la Reina se convertirá en un espacio abierto y transversal, donde el peatón será el protagonista.
Finalmente, pese a que el entorno de la Lonja y el Mercado Central ya está peatonalizado, sí que se ha proyectado una actuación que pondrá en valor los elementos patrimoniales de la ciudad, al tiempo que se crean espacios de descanso, ocio y reunión, que convertirá este espacio en un nexo de unión social.
En definitiva, se tratan de actuaciones que permitirán que, por primera vez, la ciudadanía pueda disfrutar completamente del centro de la ciudad, y más en estos tiempos de coronavirus en los que mantener una buena calidad de aire y apostar por la sostenibilidad se ha convertido en un aspecto esencial.