La Conselleria de Innovación, Industria, Comercio y Turismo ha vuelto a inscribir en el Registro de Empresas, Establecimientos y Profesiones Turísticas de la Comunidad Valenciana los 24 apartamentos turísticos promovidos por la empresa madrileña Axis Consultoría en Soluciones Empresariales en el complejo residencial Nicet, en el barrio de Patraix (Valencia), a pesar de la moratoria municipal vigente y de los recientes cambios legislativos.
Desde la Junta de Gobierno de Residencial Nicet, comunidad donde se ubican los inmuebles, se ha expresado una profunda preocupación por esta decisión. Recuerdan que el mismo proyecto ya fue previamente anulado por incumplir la normativa autonómica, que establece que una licencia cancelada no puede ser solicitada de nuevo hasta pasados tres meses, y solo con una nueva declaración responsable y conforme a la normativa vigente.
Según explican los vecinos, Turismo reinscribió los apartamentos los días 25 de marzo y 2 de abril, a pesar de que las obras aún no han finalizado y los pisos carecen de servicios básicos como luz y agua. Además, señalan que el Ayuntamiento de Valencia no ha emitido el correspondiente certificado de fin de obra, condición indispensable para autorizar la actividad.
“Nos parece incomprensible. Mientras el Ayuntamiento promete mano dura contra los apartamentos turísticos irregulares, la Conselleria inscribe estos inmuebles sin que se cumplan los requisitos legales más básicos”, denuncian desde la comunidad de vecinos. “¿Se puede otorgar una licencia turística sin tener obra terminada, sin suministros, y sin respetar la normativa local ni autonómica?”, se preguntan.
La comunidad ha solicitado formalmente a la Dirección General de Turismo la baja de estos apartamentos del Registro, basándose en el artículo 78 de la Ley 15/2018 de Turismo, al no haberse iniciado la actividad dos meses después de la presentación de la declaración responsable.
Este episodio no es nuevo. A principios de año, los vecinos ya consiguieron que Turismo diera de baja los apartamentos. En aquel momento, Axis declaró a varios medios que renunciaba a la licencia turística y que modificaría su estrategia. Se especuló incluso con el uso de la llamada “trampa de los 11 días”, una fórmula utilizada por algunas empresas para simular alquileres temporales y evitar así las restricciones del turismo vacacional.
Sin embargo, lejos de abandonar el proyecto, Axis ha optado por reinscribir directamente los apartamentos como turísticos, reactivando un plan que aseguraron haber descartado. “Solo fue una maniobra de distracción para evitar el rechazo mediático. Su intención siempre ha sido explotar los apartamentos con fines turísticos”, denuncian los vecinos.
La nueva inscripción se produce en un contexto especialmente sensible: el Ayuntamiento de Valencia mantiene activa una moratoria para nuevas licencias turísticas en barrios como Patraix, con el objetivo de proteger el uso residencial y frenar la turistificación. Además, tanto la Ley de Turismo autonómica como la Ley de Propiedad Horizontal han sido modificadas recientemente, otorgando mayor poder a las comunidades de vecinos para vetar estas actividades.
De hecho, con la reforma de abril de la Ley de Propiedad Horizontal, cualquier actividad turística en el edificio requiere no solo la licencia correspondiente, sino también la autorización de tres quintas partes de los propietarios, algo que Axis no tiene ni tendrá, según asegura la comunidad.
Además, los estatutos del edificio fueron modificados en mayo de 2024, antes del inicio de las obras, para prohibir expresamente el uso turístico de las viviendas, en aplicación de la nueva legislación.
Desde la Junta de Gobierno de Residencial Nicet y la Asociación Vecinal de Patraix insisten en que el proyecto de Axis es incompatible con la legalidad actual y el rechazo vecinal. Por ello, hacen un llamamiento a la consellera Marian Cano y al director general de Turismo, Israel Martínez Fernández, para que frenen esta actuación que consideran una clara vulneración de las normas urbanísticas, turísticas y de convivencia.
“Es hora de cerrar definitivamente este conflicto. Las instituciones ya han marcado el camino: moratoria municipal, reforma autonómica y cambio de la legislación estatal. Solo falta que se haga cumplir”, concluyen los vecinos.