Los vecinos y vecinas de los barrios colindantes de la avenida Perez Galdós llevan pidiendo una remodelación desde pocos años después de que se inaugurara el túnel que cruza con la avenida del Cid. Cuando se inauguró en los años 60, ya levantó quejas de la ciudadanía y ahora, el Ayuntamiento de València les ha escuchado. De hecho, han elaborado un manifiesto donde exponen sus motivos. Sandra Gómez, vicealcaldesa de València, ha anunciado que sacará a concurso una reforma integral de la avenida para conseguir la pacificación urbanística.
"Queremos que la avenida deje de ser una autopista" ha destacado la vicealcaldesa. Y es que en la actualidad la velocidad a la que van los vehículos por esta vía es bastante más elevada que en las carreteras cercanas. El proyecto busca "dar mayor prioridad a los vecinos frente a los coches", explicaba Gómez.
El concurso de ideas saldrá inmediatamente y aunque no se sabe todavía cuál será la ruta a seguir, desde el Ayuntamiento se están planteando la eliminación por completo del túnel: "vamos a contemplar eliminar el túnel para conectar los barrios. De esta forma, quitaremos también un tramo conocido por ser una zona de concentración de accidentes". No obstante, "en el concurso, tendremos una reunión con Fuera Túnel, una organización de vecinos de la zona de Pérez Galdós, para contar con el mayor número de apoyos y valorar las posibles soluciones, siempre y cuando las condiciones sanitarias lo permitan" explicaba Sandra Gómez.
Esta reforma integral de pacificación forma parte de la gran cantidad de remodelaciones que está llevando a cabo el Ayuntamiento de València de remodelación de plazas, creación de más espacios verdes y de potenciación de la movilidad sostenible: "Desde el Ayuntamiento queremos hacer más zonas amables, por eso, desde urbanismo trabajaremos por la pacificación de la avenida Perez Galdós".
"Ahora es el momento de repensar la avenida", ha manifestado el Grezzi. "Es el momento de superar esa concepción de autopista urbana, que genera gran intensidad de tráfico" y, en su lugar, "transformarla, con el proyecto definitivo, en un bulevar verde". El proyecto de Movilidad Urbana incluye siete pasos para peatones adicionales, aceras más amplias de hasta cuatro metros, un nuevo eje ciclista unidireccional y recuperará zonas para viandantes. Además, se desplazarán siete de las 17 paradas de la EMT para que sean más accesibles y las áreas de aparcamiento situadas a los laterales del túnel dispondrán de un espacio para bajar el vehículo sin necesidad de cruzar los carriles utilizados para el tráfico rodado. Grezzi ha hecho hincapié en "el espíritu de transformar una autopista urbana hasta, con el proyecto definitivo, un bulevar verde" y ha reiterado su "apoyo a las reivindicaciones del vecindario de una avenida sin túnel".
El concejal ha manifestado que ha sido "un trabajo de complejidad notable" debido a la longitud de la vía, la estrechez de las aceras, los más de 600 bolardos existentes que deberán retirarse, la cantidad de vados y el reducido número de pasos para peatones, que generan "importantes problemas de accesibilidad y poca seguridad". En su lugar, se incrementarán en siete los pasos para viandantes en la avenida Pérez Galdós, entre el paseo de la Petxina y la avenida Giorgeta, que se ubicarán en chaflanes en lugar de en zonas de cruce "para que el acceso sea más directo y cómodo para los vecinos y vecinas". Asimismo, se duplicarán las aceras, "pasando de los 2,52 metros actuales a los cuatro metros".
También se creará un nuevo eje ciclista unidireccional al estilo del que se está poniendo en marcha en la avenida Ferran el Catòlic, "con un espacio de ampliación EMT-Taxi, que permitirá recorrer toda la avenida y conectar con los carriles bici ya existentes y con los futuros que se van a hacer" en la avenida del Cid, calle Sant Josep de Calassanç, calle Conca y avenida Tres Forques. Además, "se van a recuperar zonas peatonales para transitar mejor". Ello con "el espíritu de mejorar la movilidad para los viandantes, que es una petición unánime vecinal, humanizar, recuperar espacio, crear ejes ciclistas, que también es una demanda vecinal, y eso contribuirá a reducir el tráfico, a reducir la velocidad" y "alejar el tráfico motorizado de las viviendas y disminuir la contaminación acústica".
De momento, la presentación de la pacificación está valorado en medio millón. Desde movilidad han estado trabajando en planificar cómo subir el tráfico arriba, ya que eso elevará de forma considerable el tráfico de la superficie.
La eliminación del túnel de Pérez Galdós como proyecto ecológico
Sandra Gómez ha explicado cómo afectaría la eliminación del túnel ecológicamente a València: "dentro del túnel, las velocidades son mayores, y por tanto, mayor contaminación en la emisión de gases. Además, las contaminaciones acústicas son más fuertes". Por otro lado, ha querido resaltar que el túnel provoca que haya un tramo muy largo en el que no hay ningún paso a nivel para peatones.Desde el Ayuntamiento se comprometieron en primavera a escuchar a los vecinos pero con la pandemia provocada por el Coronavirus no fue posible ponerse en contacto antes. En cuanto a los posibles resultados, ya se sabe que la venida se reducirá a dos carriles en cada lado, un carril bus y un carril bici.
En cuanto a qué ocurrirá con el túnel aun no se ha decidido, pero, una de las posibilidades que se están barajando es la de construir un depósito de tormentas. "Arriba, en la zona central se podría construir un parque vegetal. Lo que sí que queremos es no rellenarlo, si no utilizarlo", ha finalizado la vicealcaldesa.