Vivir en València cada vez es más caro. Tal es así que un estudio elaborado por la plataforma de alquiler para estudiantes Live4life ha desprendido que el precio del alquiler de una habitación ha subido un 10% en la capital valenciana y se sitúa ya en una media de 330 euros, lo que supone 30 euros más que el pasado año.
La empresa se ha centrado en un nicho de mercado compuesto por unas 105.000 personas y en las áreas más cercanas a los centros universitarios, donde la situación está más tensionada en cuanto a precio debido a factores como la proximidad o el ambiente social generado.
Los vecinos y vecinas de la zona llevan sufriendo dos años encadenados de encarecimiento, puesto que al aumento del 15% del año pasado este año se suma otro 10%. Desde Live4life indican que esto se debe en gran parte a que la crisis económica generada durante el coronavirus "se va quedando atrás en el mercado del alquiler".
Además, esta empresa apunta que la aprobación de la nueva Ley de Vivienda será "positiva" en este sector porque "beneficiará indirectamente a este tipo de alquileres temporales" ya que "muchos propietarios decidirán pasarse al mercado de alquiler de temporada, donde no hay un control de precios fijados". De esta manera, "la oferta será mayor y los estudiantes podrán captar habitaciones a menor precio".
En ese sentido, el CEO de Live4life, Alberto Añaños, destaca que València aglutina "numerosas características que atraen a los jóvenes estudiantes": el clima, la calidad educativa y la facilidad de transporte. "Es un buen centro tanto para formarte como para potenciar tu vida social, que es algo que todo estudiante siempre valora a la hora de alquilar", afirma.
Con todo, los 330 euros de precio medio de alquilar una habitación en València está todavía por debajo de ciudades como Madrid, que mantiene como el año pasado unas cifras en torno a los 500 euros, aunque sigue siendo más cara que Granada, con una media de 250 euros, y Sevilla, cuyo precio medio ronda los 300 euros.