El pasado 12 de marzo, las piscinas de los barrios valencianos de Ayora y Abastos cerraron sus puertas debido al alza de los precios en general, y la imposibilidad de poder gestionar ambos centros. Ahora, el Ayuntamiento de València y la empresa concesionaria han llegado a un acuerdo para que se continúe dando servicio en ambas instalaciones deportivas a partir de septiembre.
El concejal de deportes, Javier Mateo, ha mostrado su satisfacción ante este acuerdo ya que así toda la población de estos barrios podrán disfrutar de los servicios después del verano. “Además, también garantiza el empleo de 50 familias que dependen de estos centros”, añadía el edil.
La reapertura de los dos centros se producirá en septiembre, cuando finalicen los trabajos de condicionamiento de las instalaciones. Debido a los varios meses de inactividad, las instalaciones deben ser revisadas y limpiadas para que estén en las mejores condiciones para el disfrute de vecinos y vecinas.
A pesar del cierre de instalaciones como los vestuarios, las piscinas y les zonas spa, el resto de actividades que se realizaban en estos centros se han seguido realizando ya que no suponían un gran coste. Es por ello que actividades como la sala de musculación, actividad física, spinning, fitness y las actividades dirigidas han continuado prestando servicio con normalidad durante todo el verano.
Aumento de precios, cierre de piscinas
Supera, empresa concesionaria que realiza la gestión de ambos centros, decidió cerrar de forma unilateral las zonas de baño y spa de los centros de Ayora y Abastos debido a el alza de los precios provocada en marzo principalmente por la guerra en Ucrania. Ahora será esta misma empresa la que gestionará a partir de septiembre estas zonas, y sin ningún tipo de sanción por parte de las autoridades locales tras seis meses de inactividad.
Javier Mateo ha recalcado que “gracias a las medidas tomadas por el Gobierno central para paliar el incremento de los costes energéticos, el mantenimiento de las piscinas serán, incluso, inferiores”. Además, ha destacado el papel del consistorio y de su concejalía en el acuerdo alcanzado, siempre con la prioridad de dar el servicio a los vecinos y vecinas y garantizar el empleo de las 50 familias dependientes de estos centros.
Con la apertura de estas dos piscinas, la ciudad de València volverá a tener la totalidad de sus piscinas en funcionamiento, ya que el resto de piscinas de la ciudad ha podido continuar abiertas y ofreciendo servicios con total normalidad.