El concurso de ideas del Parque de Desembocadura de València avanza. La Junta de Gobierno Local ha aprobado este viernes la siguiente fase del proceso. De los equipos candidatos, un total de 19 cumplen los requisitos y, por tanto, a partir de que se publique el listado en el boletín oficial, se abrirá un plazo de 60 días para que presenten las propuestas. Un jurado especializado elegirá las cinco mejores, que dispondrán de dos meses para entregar el proyecto definitivo del que saldrá el futuro parque de Desembocadura.
Sin duda, una apuesta importante del Ayuntamiento de València que no solo se sumará a la lista de pulmones verdes de la ciudad, sino que culminará el proyecto del jardín del Turia de València. Y es que el parque de Desembocadura ocupará un total de 25,3 hectáreas, desde el puente de l’Assut hasta el barrio de Natzaret.
Una extensa zona verde que convertirá el jardín del río Turia en un corredor verde de principio a fin al dar una solución a los últimos tramos del antiguo cauce. Pero, además, como señalaba el alcalde de València, Joan Ribó, “con la culminación de este proyecto, repararemos, en parte, una deuda histórica con los barrios de Natzaret y La Punta, que se vieron afectados por la ampliación del Puerto”.
Asimismo, el futuro parque engloba en un único proyecto paisajístico la conexión con los sectores urbanísticos de Francia, Ciutat de les Arts i les Ciències, Moreras-II, Cocoters y Grau. De esta manera, el objetivo final es que el jardín del Turia arranque desde el parque de Cabecera y culmine en el de Desembocadura. “Se trata de uno de los proyectos de infraestructura verde de mayor envergadura – apuntaba el vicealcalde Sergi Campillo – que requiere la colaboración de diversos servicios municipales, como el área de Urbanismo, a través del servicio de Proyectos Urbanos, que gestionará el contrato del parque; el Ciclo Integral del Agua para integrar la lámina de agua que queda al final del antiguo cauce del Turia; el OAM de Parques y Jardines, que gestionará el mantenimiento del espacio verde, y Alcaldía”.
Con una inversión de casi 35 millones de euros, de los que 9 millones los aportará el Puerto de València para el desarrollo de la primera fase – correspondiente a los 86.000 m² desde el barrio de Natzaret hasta el puente Astilleros – el futuro parque de Desembocadura está llamado a convertirse en el tercer pulmón verde de València, después del Jardín del Turia y el Parque Central.
Una vez seleccionada la propuesta ganadora del concurso de ideas, se estima un plazo de ocho meses para la redacción del proyecto desde que se firme el contrato, y un plazo de ejecución de 24 meses desde la adjudicación.