El alcalde de València, Joan Ribó, y el vicealcalde y concejal de Ecología Urbana, Sergi Campillo, han presentado, esta mañana, el nuevo contrato para cuatro años del servicio de mantenimiento y limpieza de los espacios ajardinados, de sus instalaciones y equipamientos y del arbolado viario de la ciudad. Una contrata que cuenta con una inversión de más de 21 millones de euros, lo que supone un incremento del 46% respecto al que se firmó en 2015.
Como ha señalado el alcalde, “el nuevo contrato no solo incluirá servicios como la apertura y cierre de jardines, sino que incrementará el número de personal, pasando de 274 a 353 personas trabajadoras, y recuperará la contrata específica para la poda del arbolado viario que el Partido Popular eliminó del anterior contrato por los recortes”. En este sentido, Ribó ha señalado que “València, además de tener un cuerpo específico para podar el arbolado viario, dispondrá de un 80% más de recursos para, entre otras cosas, la recuperación y el tratamiento específico para el mantenimiento de los árboles monumentales, que el PP también eliminó de la anterior contrata”.
Actualmente, València cuenta con 630 hectáreas de parques y jardines urbanos, así como con más de 200.000 árboles “que requieren atención profesional”. De esta manera, y en palabras del alcalde, el nuevo contrato de jardinería “marca un antes y un después tanto cuantitativa como cualitativamente, favoreciendo una ciudad más natural, amable y acogedora”. Así, ha recordado que “las anteriores legislaturas de gobierno municipal del PP fueron recortando el presupuesto destinado al mantenimiento con la consiguiente precarización del servicio público, incluyendo la jardinería, y no fue hasta 2019 cuando conseguimos incrementar el presupuesto hasta un 10% llegando al límite legal de modificación contractual para ir mejorando gradualmente la gestión”.
Por su parte, el vicealcalde Sergi Campillo ha explicado que “el nuevo contrato da un impulso a los criterios de sostenibilidad en la gestión, desde la reutilización de restos vegetales para su reincorporación al ciclo biológico de los jardines, los tratamientos biológicos ante las plagas, el control mecánico de adventicias y el respecto de las épocas de nidificación de pájaros”.
Asimismo, Campillo ha afirmado que “este nuevo contrato es un argumento más a favor de València para convertirse en una referencia europea en políticas verdes”. Y es que, en estos momentos, la capital del Turia es finalista para optar a la Capitalidad Verde Europea 2024.
Características de la nueva contrata
El nuevo contrato comportará el mantenimiento, limpieza, riego y cultivo de cerca de 2.800.000 metros cuadrados de zonas verdes de la ciudad. Solo los jardines de la Rambleta y el parque adscrito al Campus de Tarongers, de unos 68.000 metros cuadrados, se reservan para su gestión por centros especiales de empleo o empresas de inserción social.
Además, la contrata incluirá también el mantenimiento y cuidado de elementos inertes como paseos, viales, pavimentos, espacios de socialización canina, juegos infantiles, mobiliario o fuentes, entre otros. Este punto incluye la atención a los 699 jardines de la ciudad y los 118.147 árboles existentes, así como las 645 zonas infantiles (56.976 metros cuadrados y 1.806 elementos), los 88 equipamientos biosaludables (385 elementos) y las 45 zonas de socialización canina (20.456 metros cuadrados).
A partir de ahora, además, se incluyen en la contrata servicios como el mantenimiento de los árboles monumentales y la conservación del arbolado viario, que había desaparecido de los últimos contratos. Además, se incorporan nuevas prestaciones como la apertura y el cierre de los parques y jardines.
El nuevo contrato supone un incremento del 29% del personal adscrito al servicio de mantenimiento de los espacios ajardinados. Así, de los 274 trabajadores actuales pasaremos a 353 personas. Además, el 50% de los nuevos contratos que se produzcan deberán ser de mujeres y las nuevas incorporaciones deberán disponer de formación reglada. Igualmente, habrá 174 vehículos y 371 piezas de maquinaria, todas con etiqueta ECO y el 50%, como mínimo, deberán ser vehículos eléctricos.
El contrato asciende a 21.207.020 euros, lo que supone un incremento del 46% respecto a los 14.538.808 euros del contrato anterior. El incremento es de un 36,3 % en los espacios ajardinados y del 80% en la gestión del arbolado viario. Con este presupuesto, el coste unitario por metro cuadrado pasa de 3,52 euros a 5,54 euros.