La magia navideña está a la vuelta de la esquina en Valencia y uno de sus símbolos más queridos ya toma forma junto al mar. La Feria de Atracciones de Navidad, una tradición imprescindible para miles de familias cada invierno, avanza en su instalación en la zona del puerto. Aunque con la vista puesta en su posible apertura este sábado 29 de noviembre, - una semana antes que el año pasado -, de momento, la fecha sigue en el aire.
El recinto vuelve a ocupar su ubicación habitual, entre la avenida de Francia y la calle Ingeniero Manuel Soto, muy cerca del emblemático Edificio del Reloj. Desde hace días, quien pasea por la zona puede ver cómo las estructuras metálicas comienzan a elevarse, dejando entrever el inicio de la temporada navideña en la ciudad.
Los feriantes quieren abrir ya, pero falta documentación
La intención de los feriantes es clara: arrancar la actividad cuanto antes para aprovechar los primeros fines de semana de ambiente navideño. Su propuesta al Ayuntamiento fija la apertura en mañana sábado 29 de noviembre, una fecha que adelantaría en una semana el arranque habitual de la feria.
Sin embargo, fuentes municipales enfrían el optimismo. Según explican, aún falta por entregar parte de la documentación obligatoria para obtener los permisos. Entre los papeles pendientes figuran la subsanación de requerimientos técnicos y el informe definitivo sobre la documentación presentada. Hasta que ese proceso no esté completado, el Consistorio no puede autorizar la apertura, lo que - dado que hoy ya es viernes - es lo más probable. Esto hace que, aunque la intención sea arrancar este fin de semana, la fecha real pueda retrasarse algunos días.

49 atracciones, novedades y clásicos imprescindibles
Mientras tanto, el montaje continúa a buen ritmo. Este año, se estima que la feria contará con 49 atracciones, dos o tres de ellas completamente nuevas. La mayoría están orientadas al público adulto, aunque alrededor de una veintena se reservan para los más pequeños. Entre los clásicos que nunca faltan vuelven a estar el Ratón Vacilón, el barco pirata, el tren de la bruja y los coches de choque. Eso sí, este año tampoco habrá noria.
Junto a ellas, no faltarán las habituales casetas de juegos, tómbolas y puestos de comida que llenan de aromas el paseo: hamburguesas, embutidos, patatas fritas o cocidas, algodón de azúcar, manzanas caramelizadas y panojas, entre otras propuestas.
El recinto cuenta con una zona de parking habilitada en los alrededores del puerto para quienes opten por ir en coche. Además, la feria estará conectada con varias líneas de la EMT, lo que facilita la llegada desde distintos puntos de la ciudad. Entre las líneas que acercan hasta la zona del puerto se encuentran la 4, 30, 95, 92 y 19.
Con el montaje avanzado y la propuesta de apertura ya sobre la mesa, toda la atención se centra ahora en la resolución administrativa. Mientras tanto, Valencia ya huele a Navidad y la feria, aunque aún sin fecha segura, está a punto de despertar.