El Ayuntamiento de Valencia comienza una batería de medidas y campañas para fomentar un consumo responsable y en valores de cara a las compras de juguetes para Navidad. Así, se han presentado dos campañas que inciden, por un lado, en los valores no sexistas de los juguetes, y por otro, en las medidas de seguridad a observar.
La Concejalía de Igualdad y Políticas inclusivas ha lanzado una campaña para instar a la ciudadanía para que advierta la importancia del juego, “que es la mayor herramienta de aprendizaje, además de un medio de socialización, que puede prevenir comportamientos machistas y contribuir a la construcción de una sociedad igualitaria”. En el marco de esta iniciativa, y con el lema “Si jugamos iguales, seremos iguales”, ha editado, por ejemplo, un periódico, dirigido a padres, madres, comunidad educativa y sociedad en general, para promover la compra no sexista de juguetes.
La campaña se desarrolla en varios soportes divulgativos. Concretamente, se han editado 30.000 periódicos y 3.000 carteles que protagonizan juguetes, “que han visto cómo juegan los niños y niñas y en qué se convierten, y reclaman igualdad”.
La concejala de Igualdad y Políticas Inclusivas, Isabel Lozano, ha presentado esta campaña, que también estará presente en el mobiliario urbano, medios de comunicación, web (www.juguetesporlaigualdad.com) y redes sociales #JoguetsPerLaIgualtat. “Se trata”, ha explicado, “de una iniciativa para concienciar a la población de que con el juego se enseñan conceptos que se utilizarán en la vida adulta, y también conceptos sociales. Quién es quién, y en qué posición está en la jerarquía social, los roles, el grupo, la pareja, el trabajo...”.
Isabel Lozano ha asegurado que es fundamental “abrir la reflexión sobre las posibilidades que damos a los niños y niñas para que desarrollen su personalidad, y si lo hacemos desde los parámetros sexistas que los juguetes tienen”. De esta manera, la concejala se ha hecho eco de las palabras que los juguetes que en esta campaña cobran personalidad expresan con frases como “las chicas también tienen pies, y ese es el único requisito para chutarme”, que dice el balón, o “quiero salir de casa, escalar montañas, navegar en un barco pirata y conquistar otros mundos”, que dice la muñeca rubia que confiesa que también quiere jugar como los chicos.