El alcalde de Valencia, Joan Ribó, ha firmado, en un acto conjunto, los convenios para la prestación de asistencia religiosa en el Cementerio General a las comunidades católica, musulmana e israelita. Los tres convenios tienen una duración de cuatro años. El objeto, en el caso de las comunidades musulmana e israelita, es dotarlas de unidades de enterramiento específicas para las prácticas propias de cada una de esas confesiones, mientras que en el de la católica se especifica la prestación de asistencia religiosa en la capilla del Cementerio General.
“Valencia es cada vez más una ciudad que acoge a todas las personas asumiendo sus creencias religiosas, y por eso queremos que todas las creencias religiosas puedan desarrollarse con total libertad y todas las personas puedan tener los mismos derechos independientemente de su religión o no religión”, ha afirmado el alcalde Joan Ribó tras la firma de sendos convenios para la prestación de asistencia religiosa en el cementerio municipal a las comunidades católica, musulmana e israelita, en un acto del que han sido también testigos la concejala de Medio Ambiente, Pilar Soriano, y el secretario autonómico de inclusión, Alberto Ibáñez..
Joan Ribó ha señalado que estos convenios que ha suscrito junto a Vicent Fontestad, vicario general del Arzobispado de Valencia; Abdul Rahim Yaghmour, presidente de la Comunidad Islámica de Valencia, e Isaac Sananes, presidente de la Comunidad Israelita de Valencia sirven “para garantizar derechos de las personas y la pluralidad de todas las grandes religiones representadas en Valencia”. Ha añadido que “estos acuerdos tienen mucha simbología para mí como alcalde de Valencia porque son para habilitar espacios en el cementerio a las tres religiones en actos relacionados con la muerte de un familiar, momentos especialmente sensibles en la vida de los familiares y amigos que han acompañado a una personal a lo largo de su vida”.
Ribó ha recordado que “queremos garantizar que todos tenemos los mismos derechos, y por eso damos un carácter neutro a determinados espacios para que cada religión pueda usar su propia su simbología, y quien no quiera ninguna, no haya de tenerla necesariamente”. También ha afirmado que “es un día bonito en el que damos un paso más para que Valencia sea una ciudad acogedora para todas las personas con todas sus creencias y sus culturas, y para que cualquier persona que viva en Valencia pueda disfrutar de todos los derechos”.
Vicente Fontestad, vicario general de la archidiócesis de Valencia también ha dicho sentirse muy contento por compartir este momento con la comunidad musulmana y con la comunidad israelita y por haber firmado este convenio con el Ayuntamiento. ”Efectivamente el momento de la muerte es muy importante para todas las personas, y para los que tienen fe la trascendencia es fundamental. Sentirse acompañados, sentirse respetados en sus convicciones, me parece una de las primeras libertades y derechos fundamentales de cualquier persona”. Ha añadido que por parte de la iglesia católica “el diálogo inter-religioso es algo en lo que creemos, como creemos también en el ecumenismo”.
Ihap Fahmid, presidente de la Comunidad Musulmana Valenciana ha destacado “que este convenio que nos iguala en derechos es un paso adelante para la buena convivencia entre todos y para eliminar cualquier signo de desigualdad o discriminación por etnia o por religión, lo cual siempre contribuye a lograr una sociedad más avanzada y respetuosa”. Fahmid ha agradecido el trabajo del Ayuntamiento de Valencia el trabajo realizado para la prestación de asistencia religiosa en los entierros y ha invitado a todos los municipios valencianos “a que sigan el ejemplo de Valencia de firmar un acuerdo con todas las confesiones religiosas que conviven en su municipio”.
Isaac Sananes, presidente de la Comunidad Israelita de Valencia ha recordado que, a diferencia de católicos y musulmanes, en que se trataba de una renovación de convenio, “para los judíos de Valencia esta es una fecha histórica porque hace 600 años que no teníamos cementerio. Es la primera vez que conseguimos firmar un convenio que llevaba gestándose muchos años. La firma va a suponer un hito que recordaremos todos, y queremos agradecer su apoyo a los gestores del Ayuntamiento para conseguirlo. Pera nosotros este es el segundo cementerio. El anterior fue del siglo XIV y este es del siglo XXI. Llevábamos unos cuantos siglos esperando, así que muchísimas gracias”