Tras un proceso de restauración que ha durado más de un año y ocho meses, la emblemática campana "El Borrego de Sant Joan" regresa a su campanario en los Santos Juanes de València. Esta campana, la más grande de la ciudad con más de dos toneladas de peso, ha sido sometida a una minuciosa restauración junto con el resto de campanas, que culmina con su reinstalación en el campanario.
La intervención en los Santos Juanes, promovida por la Fundación Hortensia Herrero, ha sido un proyecto de envergadura que ha abarcado la restauración del campanario y la bajada de todas las campanas para su reparación. Ahora, el retorno de "El Borrego" a su lugar original es un hito importante en este proceso de restauración.
Según informa el Arzobispado, la subida de todas las campanas, incluyendo "El Borrego", se llevará a cabo este miércoles a partir de las 15:00 horas. Los Campaners de Sant Joan de la Boatella estiman que el proceso durará más de dos horas, siendo "El Borrego" la última en ser instalada.
Durante su ausencia del campanario, "El Borrego de Sant Joan" ha permanecido expuesta en el interior del templo junto con las demás campanas restauradas. Esta oportunidad ha permitido a los fieles y visitantes contemplar de cerca el resultado del proceso de restauración.
Restauración en Ontinyent
La restauración de las siete campanas ha sido llevada a cabo por la empresa Electro Recamp en Ontinyent, durante un período de casi dos años. Este proyecto ha incluido la restauración de "El Borrego", que experimentó su primera restauración desde su creación en 1738.
La restauración de las campanas ha sido sufragada por los feligreses y entidades vinculadas a la parroquia, pero aún se necesita colaboración económica para cubrir los costes totales. La restauración incluye la limpieza de los bronces, la instalación de nuevos contrapesos de madera y la reparación del reloj del campanario.
Con la reinstalación de "El Borrego de Sant Joan", se marca un hito significativo en la historia de los Santos Juanes. Esta campana, testigo de los acontecimientos a lo largo de los siglos, retoma su lugar en el campanario para seguir marcando el ritmo de la vida en el corazón de València.