Arrancan la campaña de control que el Ayuntamiento de Valencia ha puesto en marcha con el objetivo de evitar que vehículos privados invadan los carriles Bus - Taxi. Para ello, en coordinación con la Policía Local y EMT Valencia, se llevarán a cabo acciones de sensibilización sobre los perjuicios que supone circular por los carriles destinados al transporte público. Una campaña que, aunque primero será informativa, comportará sanciones económicas.
Así, durante esta semana se inicia la primera fase, informativa, de la campaña de control y vigilancia de los carriles reservados a los autobuses de EMT y los taxis. Esta fase consistirá en avisos, información de la normativa vigente y recomendaciones a las personas usuarias de vehículos privados que recurren con frecuencia al carril bus-taxi.
Tras esta primera semana, la campaña desarrollará una segunda fase en la que se contemplan sanciones y que pueden llegar hasta los 300 euros, según marca el actual ordenamiento.
El concejal de Movilidad, Jesús Carbonell, ha señalado que la invasión frecuente del carril bus-taxi “dificulta de las dinámicas de un buen servicio de transporte público en la ciudad, ya que tanto los aparcamientos mínimos o prolongados como la circulación frecuente de vehículos privados que no está permitida provocan retenciones, colapsos circulatorios, pérdidas de frecuencia y accidentes”.
“La Ordenanza de Movilidad establece el transporte público colectivo de personas viajeras como el elemento central de la movilidad urbana. Es importante la intervención de la Policía Local en la mejora de la circulación en estos carriles, una actuación que redunda, además, en la mejora de la seguridad vial y minimiza el riesgo de maniobras o frenadas imprevistas que pueden provocar caídas de los pasajeros que se encuentran en el interior de los autobuses”, ha destacado Carbonell.
Asimismo, el concejal ha indicado que “debemos tener muy presente que el uso del transporte público y su fomento reducen notablemente la utilización del vehículo privado y ayudan a mejorar la calidad de vida de las personas y a preservar el medio ambiente en la ciudad”, quien además se ha mostrado “plenamente confiado en que esta primera fase de la campaña, más didáctica y formativa, redundará en buenos frutos”.
Por su parte, la Policía Local y la EMT han realizado un análisis previo de las zonas de la ciudad con mayor frecuencia de ocupación no autorizada del carril bus, donde incluso se ha cronificado su uso en determinados tramos horarios. Este análisis ha servido para configurar los equipos de trabajo que este lunes inician la fase informativa, así como para detectar los puntos en los que se van a intensificar los controles, a pesar de que la campaña abarca la red de carriles de toda València.
El origen de esta campaña surge en el seno de la compañía municipal de transporte a raíz de las reuniones mantenidas con las propias centrales sindicales de EMT València, quienes han solicitado reiteradamente que se acabe con la ocupación no permitida de los carriles bus, ya que esta práctica incide de manera negativa en el desarrollo diario de la labor de los conductores.