Agentes de la Policía Nacional salvan a un niño en Sagunt que se había atragantado y estuvo diez minutos sin respiración

El menor de 4 años estuvo inconsciente y sin poder respirar aunque sus constantes se estabilizaron tras las maniobras de los agentes

Guardar

Vehículo de la Policía Nacional
Vehículo de la Policía Nacional

Agentes de la Policía Nacional han salvado la vida a un niño de cuatro años que sufría un atragantamiento en su domicilio de Sagunt. El suceso ocurrió el pasado miércoles 8 de febrero entorno a las 11:30 de la mañana cuando el 091 recibió una llamada de una mujer que pedía asistencia sanitaria debido a que su hijo se había atragantado y llevaba varios minutos sin respirar.

Según ha confirmado en un comunicado la Policía Nacional, la mujer llamó muy alterada pidiendo ayuda urgentemente porque el niño, de cuatro años, no podía respirar debido a un atragantamiento. Fue entonces cuando diversos agentes de este cuerpo policial se desplazaron hasta el lugar de los hechos. Al llegar, pudieron acceder a la vivienda rápidamente, ya que la puerta de entrada de esta se encontraba abierta. 

En su interior, el menor estaba tumbado en el sofá donde varias personas le estaban realizando técnicas de reanimación cardiopulmonar. Aún así, en esos momentos, el niño se encontraba en un estado de inconsciencia, no tenía respiráción desde hacía 10 minutos y su pulso era muy débil.

Los agentes comprobaron si había algún objeto que estuviera obstruyendo las vías respiratorias al menor, aunque a simple vista no pudieron observar nada, por lo que empezaron a realizarle la maniobra de Heimlich pediátrica y el menor comenzó a reaccionar emitiendo un leve sonido similar a un llanto. Después, el niño recuperó la consciencia y se puso a llorar.

No obstante eso, unos instantes después el menor sufrió un espasmo en su brazo, perdió el foco visual con el entorno y sus ojos quedaron totalmente en blanco y en estado semi-insconciente, por lo que fue necesaria nuevamente la actuación del agente que observó la lengua del menor retrotraída y procedió a colocarlo en posición lateral de seguridad después de realizar la maniobra frente-mentón y desobstruir las vías respiratorias.

Después de la actuación del agente, el niño volvió a estar en un estado de consciencia y sus constantes vitales volvieron a estabilizarse. Hasta el domicilio también se movilizó el personal sanitario y el menor fue trasladado a un hospital donde poder ser evaluado tras el atragantamiento. 

Destacados