Es Nathaly Salazar, la ecuatoriana residente en València que lleva desaparecida en Perú desde el pasado 2 de enero, cuando fue vista por última vez en la salida del hotel de Cuzco donde se alojaba. Es lo último que se conoce de ella, que se dirigía a visitar unas ruinas situadas a hora y media de la ciudad en autobús. Ahora, sus padres han viajado a Lima para reunirse con el embajador y trasladarse a la ciudad de Cuzco, donde seguirán las investigaciones más de cerca.
Por ahora no se descarta ninguna hipótesis, dado el desconocimiento que se tiene aún sobre el caso. La búsqueda en Cuzco, que ha empleado a perros adiestrados en localización de personas, no ha dado ningún fruto, por lo que ahora el rango de actuación se ampliará a las ruinas a las que se dirigía y a otros lugares turísticos de la zona. El registro de su habitación y de sus pertenencias tampoco han arrojado más información que la que ya se tiene.
Es el cuarto día de búsqueda, y, según la hermana de la desaparecida, residente de Barcelona, Tamara Salazar, "el cónsul está mandando a la familia todas las noticias sobre lo que se está haciendo para que vean que realmente están moviéndose y haciendo todo lo posible" para hallar su paradero.
Nathaly es una joven de 28 años de nacionalidad española que llegó a València con su familia cuando tenía 11 años. Estudió Actividad Física y del Deporte y también trabajó en el Mercado Central de la ciudad. Hasta septiembre. Entonces partió de la ciudad para visitar como "mochilera" diferentes países. Había estado en Ecuador y ahora se encontraba en Perú desde el pasado 28 de diciembre.