Novedades en el caso del asesinato de un abogado en Llíria. La Guardia Civil de València se encuentra investigando el suceso acontecido el pasado sábado 25 de junio cuando se encontró un cadáver que presentaba signos de violencia en un chalé de la misma localidad.
Los especialistas en Homicidios de la Guardia Civil de València han asumido el caso. Tras varias investigaciones, consideran que el vehículo fue utilizado por la persona que mató a José, licenciado en Derecho pero que no ejercía. Lo habría hecho en la madrugada de la noche de San Juan para escapar de la casa lo más rápidamente posible, por lo que todo apunta a que no llegó a la vivienda por sus propios medios, lo que facilitará rastrear su identidad.
En los últimos días se ha inspeccionado el coche que fue localizado por la Policía Local de Llíria en la tarde del viernes, aparcado junto al parque de San Vicente, con las ventanillas bajadas y abierto, sin huellas aparentes de que hubiera sido forzado.
Hasta el momento se han recogido numerosas muestras que ahora serán procesadas en el laboratorio central de la Guardia Civil. Con ello, se tratará de buscar sangre de la víctima que el autor pudiese haber transferido durante la conducción, como cualquier cosa del responsable que pudiera haber quedado impregnada en algún punto del interior del vehículo.
Los agentes de Homicidios ya han comenzado con la ronda de declaraciones a distintas personas próximas al fallecido. Tal y como informa el Levante-EMV, la novia es una de las últimas personas que le vio y los tíos son quienes hallaron el cuerpo sin vida de José a las 13.00 horas del sábado, después de que los padres les pidieran que se acercaran a la casa a ver si había pasado algo, ya que su hijo llevaba sin responder a sus llamadas desde un día antes, el viernes.
Los agentes centran sus esfuerzos en estos momentos en identificar a quienes estuvieron en la casa durante la noche de San Juan. El cuerpo de José fue encontrado en el salón con señales de numerosos golpes y con heridas abiertas que le provocaron una importante hemorragia, aunque no se han apreciado señales de arma blanca.
Sin embargo, debido a que la autopsia todavía no ha finalizado, la causa de la muerte sigue sin estar clara del todo. Se baraja que el fallecimiento se produjera como consecuencia de esos golpes o si le sobrevino un fallo cardíaco como consecuencia de la tensión de la pelea y la ingesta de alcohol.
Además, los forenses tomarán muestras de los tejidos para determinar si hubo otras sustancias además del alcohol, del que quedaron numerosos vestigios en la casa, como alguna copa con líquido dentro y varias botellas vacías. La Guardia Civil tampoco tiene claro si fue víctima de un robo, como aparenta el claro desorden de la estancia, o si es fruto de la pelea y de un posterior escenario organizado para despistar a los investigadores.