La II Feria Artesana del Pan de Valencia ha reunido hoy a cientos de personas en la explanada de Veles e Vents para celebrar el Día Mundial del Pan y el Día Mundial de la Alimentación, en una jornada dedicada a reivindicar la tradición panadera valenciana y promover el consumo de productos artesanales, locales y sostenibles.
Organizada por el Gremio de Panaderos y Pasteleros de Valencia, con la colaboración de la Diputación de Valencia y la Concejalía de Comercio y Mercados del Ayuntamiento de Valencia, la feria se consolida como un evento de referencia para difundir la riqueza y la diversidad del pan artesanal, acercando al público su valor cultural y gastronómico.
Durante la mañana, la alcaldesa de València, María José Catalá, ha visitado la feria, donde ha destacado “la importancia de mantener viva la alimentación tradicional y saludable y el papel de los hornos de barrio como puntos de encuentro vecinal”.
El pan, alimento esencial en la dieta mediterránea, aporta energía y nutrientes como hierro, magnesio, potasio, ácido fólico y vitaminas del grupo B, además de ser rico en fibra y proteína vegetal. También contiene propiedades antioxidantes que ayudan a prevenir enfermedades cardiovasculares y neurodegenerativas.
En la gran carpa instalada para la ocasión, el público ha podido disfrutar de una exposición y degustación de panes artesanos valencianos, elaborados por maestros panaderos agremiados y acompañados con aceite de oliva Grattitude.
El acto ha contado con la presencia de representantes institucionales como la directora general de Comercio, Artesanía y Consumo, Maribel Sáez, entre otros cargos públicos.
“Reivindicar el valor del pan artesanal”
Como ha explicado Juanjo Rausell, presidente del Gremio de Panaderos y Pasteleros de Valencia, “esta feria tiene como objetivo reivindicar el papel del pan artesano como producto esencial de nuestra dieta mediterránea y como símbolo de identidad cultural”.
“Los asistentes han podido conocer de primera mano los procesos de elaboración y la dedicación que hay detrás de cada pieza de pan, elaborada con técnicas tradicionales que combinan innovación, excelencia y respeto por lo artesanal”, ha añadido Rausell.
La Pataqueta, emblema del “esmorzaret” valenciano
El protagonismo de esta edición ha recaído en La Pataqueta, el pan tradicional valenciano, que el Gremio busca proteger y promover a través del reconocimiento como Marca CV, el sello de calidad de la Generalitat Valenciana que distingue los productos agroalimentarios autóctonos.
Durante la jornada se ha celebrado también una charla y un almuerzo con Pataqueta, en el que han participado Juanjo Rausell, Eva Davó, propietaria de La Cantina de Ruzafa, y el periodista gastronómico Paco Alonso.
“Queremos dar a conocer y proteger la Pataqueta como parte esencial del esmorzaret valenciano, fomentando su consumo y diferenciándola de los productos industriales que no respetan su elaboración tradicional”, ha afirmado Rausell.
Un cierre con humor y cultura gastronómica
La jornada ha concluido con la grabación en directo del podcast “Disfrutons”, de los humoristas Jajajers, quienes han dedicado un episodio especial a la historia y tradición del pan y los dulces valencianos. Con su estilo cercano y divertido, han recordado cómo los hornos artesanos han sido auténticos centros sociales en barrios y pueblos, y han reflexionado sobre los retos del sector ante la industrialización.
Con esta segunda edición, la Feria Artesana del Pan de Valencia reafirma el compromiso del Gremio de Panaderos y Pasteleros de Valencia con la defensa del pan artesanal y la promoción de la gastronomía valenciana como símbolo de identidad, sostenibilidad y cultura.