Carlos Mazón y María José Catalá lamentan la muerte del Papa Francisco

El presidente de la Generalitat y la alcaldesa de Valencia expresan sus condolencias tras la muerte del Sumo Pontífice, destacando su figura como símbolo de esperanza y compromiso social.

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El Papa Francisco recibe un ninot de manos de una Falla de València
El Papa Francisco recibe un ninot de manos de una Falla de València

El mundo lamenta la pérdida de una figura emblemática. El Papa Francisco ha fallecido a los 88 años en su residencia de la Casa Santa Marta del Vaticano, dejando un profundo vacío en la comunidad católica y un legado imborrable de diálogo, humildad y compromiso con los más necesitados.

Tras conocer la noticia, el 'president' de la Generalitat, Carlos Mazón, ha expresado su pesar a través de la red social 'X', destacando al Papa Francisco como "una figura clave de nuestro tiempo, símbolo de diálogo, humildad y compromiso con los más vulnerables". Mazón ha transmitido su "más sentido" pésame a toda la comunidad católica "en nombre de todos los valencianos", deseándole que descanse en paz.

Condolencias desde Valencia

La alcaldesa de València, María José Catalá, también se ha sumado a las condolencias, resaltando el papel del Papa Francisco como un faro de esperanza y fe. En su mensaje en 'X', Catalá ha afirmado que "la esperanza sorprende y abre horizontes, nos hace soñar lo inimaginable y lo realiza".

Además, ha añadido: "El Papa Francisco ha sido un faro de esperanza y fe para millones de personas. Un referente de humildad, cercanía y amor al prójimo. Desde Valencia, nos unimos al dolor por su partida. Descanse en paz".

Reacciones políticas

El síndic de Compromís en Les Corts, Joan Baldoví, también ha querido expresar su sentir ante la pérdida del Sumo Pontífice. A través de su perfil en la misma red social, Baldoví ha deseado al Papa Francisco que la tierra le sea "leve", añadiendo: "Siempre me pareciste una persona honesta".

Un legado de esperanza y compromiso

La muerte del Papa Francisco marca el fin de una era. Su pontificado se caracterizó por un enfoque en la justicia social, la defensa de los derechos humanos y el diálogo interreligioso. Su cercanía con los más vulnerables y su llamado a la humildad resonaron en todo el mundo, convirtiéndolo en una figura respetada y admirada más allá de las fronteras de la Iglesia Católica.

El legado del Papa Francisco perdurará en el tiempo, inspirando a futuras generaciones a construir un mundo más justo, solidario y fraterno. Su mensaje de esperanza y amor al prójimo seguirá siendo una guía para aquellos que buscan un futuro mejor.

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