La fiesta de Moros y Cristianos de Bocairent está a la vuelta de la esquina, y desde el Ayuntamiento del municipio han preparado unas medidas especiales para que todo salga según lo planeado, para unas fiestas que se celebran del 3 al 6 de febrero.
Y es que como novedad, la junta local de seguridad del municipio ha preparado un dispositivo especial de seguridad para evitar males mayores. “Serán muchas las personas que trabajarán para garantizar la seguridad tanto de los participantes como del público y, por eso, la coordinación entre ellas es fundamental”, ha subrayado Ximo Carbonell, uno de los ediles de Fiestas y Seguridad.
La medida más llamativa que se ha tomado es que la Policía realizará controles de alcoholemia aleatorios para los conductores de las carrozas de Entrada, es decir, los harán el 3 de febrero, sábado, al caer a tarde, tal y como se ha acordado en la junta.
Por otra parte, también se desplegaran efectivos para evitar otros males como robos, agresiones y actuaciones de ese tipos. En una festividad tan emotiva, algunos pueden aprovecharse de los más despistados.
Asimismo, Ximo Carbonell ha querido dejar claro que conducir una carroza con menores de edad puede ser muy peligrosos si uno o está completamente concentrado en lo que debe hacer, por ello, se ha optado por hacer los controles de alcoholemia.
“El hecho de conducir un vehículo que suele llevar menores y las características del trazado por donde discurre el acto obligan a tener personas que estén al cien por cien de sus facultades”, indica Ximo Carbonell para justificar la medida, que ya ha sido comunicada a la entidad organizadora para que avise a las personas afectadas.
Por eso, y con las medidas de seguridad adoptadas, desde el Ayuntamiento de Bocairent esperan que la fiesta de los Moros y Cristianos reine la alegría y el disfrute.